Cuatro equipos lucharán desde hoy en A Coruña por el título de la Copa Galicia de fútbol sala. Dos se presentan como favoritos y dos como aspirantes a la sorpresa. En la primera semifinal, a las 18.30 horas, el derbi entre el Ourense Envialia y el Cidade das Burgas parece desnivelada por la diferente categoría de ambos, y la segunda (20.30 horas) enfrenta al Burela, una plantilla confeccionada para ganar, y al anfitrión Viaxes Amarelle, con un presupuesto y unos objetivos más modestos.
"La ilusión mueve montañas", advierte Bea Seijas. La eterna capitana del Ourense Envialia regresa al Palacio de los Deportes de Riazor, donde debutó allá por los años 90 en el histórico Sal Lence, al que reivindica como una generación "única e irrepetible" a la que no hay que olvidar. Es la voz de la experiencia y como tal recalca la idea de "máximo respeto". Da igual que el Cidade das Burgas esté en Segunda porque los derbis "siempre son igualados". Aunque reconoce que su equipo está "a un gran nivel". "Nadie se lo esperaba y queremos disfrutarlo", añade.
También vuelve a casa Lucía Gómez, Luci, en las filas del Burela, favorito pero tocado. "La derrota contra el Futsi fue un palo bastante grande y el equipo está desanimado. En la Copa podemos darnos una alegría", señala la coruñesa. En ello incide María Gómez, capitana del Viaxes Amarelle. "Si hay un momento en el que podemos ganarles es este", comenta en relación al estado de ánimo del Burela. Y aun así será complicado. "Tenemos que estar concentradas en defensa, tirar de orgullo y en ataque ser muy efectivas", analiza. "Si perdemos que sea peleando hasta el final".
A ello se aferra un mermado por las lesiones Cidade das Burgas, además único equipo de Segunda. "A un partido puede pasar cualquier cosa", dice Sonia Pacios, "iremos a darlo todo porque en los derbis se rinde más del 100%". Muchos alicientes para una competición para no perderse.
