El corredor del Movistar Team Mikel Landa aseguró que liderar al equipo telefónico en el Giro de Italia, que se disputa del 11 de mayo al 2 de junio, no le "pesa", confesó que echará en falta tener a su lado la "madurez" de Alejandro Valverde y que la carrera rosa es "especial" porque fue en la que explotó para el gran público.
"¿Llevar el dorsal 1 del Movistar? Me hace ilusión. ¿Pesar? No, no me va a pesar. El Giro va a ser durísimo, es una carrera especial porque fue en la que exploté. Me da igual no estar en alguna lista de favoritos, no creo que Roglic o Dumoulin me den dos metros", dijo en la presentación de la cobertura de Eurosport para el Giro.
Mikel Landa, que dijo que mejora la uña del pie que se dañó en la Lieja-Bastoña-Lieja, confía en llegar con opciones a ganar la general en la tercera semana. "En la primera semana habrá un favorito, en la segunda, otro, y en la tercera, espero que haya un escalador que le dé la vuelta", expresó.
Para ello, indicó que ha trabajado en el invierno para minimizar la pérdida en las cronos, aunque la fractura en la clavícula que se produjo en la Challenge de Mallorca le frenó la progresión. "Para ganar, que haya salud y después las piernas dirán", apuntó.
