El ruso Ilnur Zakarin (Team Katusha) se impuso en solitario en una excelente decimotercera etapa del Giro de Italia, entre Pinerolo y Ceresole, de 196 kilómetros, en la que el español Mikel Landa (Movistar) realizó toda una exhibición y acabó tercero, y el esloveno Jan Polanc (UAE Team Emirates) sufrió para mantener la maglia rosa.

La primera llegada en cima de la presente edición del Giro, con final en Lago Sarrú, a 2.247 metros de altitud, resultó un auténtico festival de ciclismo, apasionante, con continuos ataques, con sufrimiento, y buena estrategia del Movistar. Se la llevó Zakarin, con 35 segundos sobre el español Mikel Nieves, su compañero de fuga, y con 1:20 sobre Landa, que descontó tiempo sobre el italiano Vincenzo Nibali, Primoz Roglic (llegaron a 2'57") y, especialmente, sobre un Polanc que llegó a 4'39" del ruso.

"He atacado desde lejos, y entre los kilómetros que faltaban y la altitud (2.2456 metros la línea de meta) he llegado fundido. estoy muy contento porque he visto un poco más débiles, más accesibles, a los rivales. Me da moral para seguir atacando, mientras las piernas aguanten", dijo Landa al término de la etapa. "Ojalá siga teniendo fuerzas hasta Verona. Es muy pronto para hablar. El Giro cambia de un día para otro, y hay que ir día a día. Está muy difícil, somos muchos corredores que queremos ganarlo. Aún estamos en la etapa trece, estamos día a día", añadió.