La selección gallega femenina regresó con la medalla de bronce del Mundial de fútbol gaélico disputado en Irlanda. Galicia cedió en la semifinal ante el combinado de New York, vigente campeón, por un contundente (7-23). El equipo masculino, por su parte, también se clasificó para la segunda fase, pero perdió en octavos frente a Francia (14-12).

El combinado femenino gallego se plantó en las semifinales tras dominar con relativa autoridad la primera fase, pero en la penúltima eliminatoria tuvo que enfrentarse a New York GAA, actual defensor del título, rival ante el que acabó perdiendo y despidiéndose del certamen que se celebra en la localidad irlandesa de Waterford y en el que intervinieron 85 equipos.

El dominio de las estadounidenses fue absoluto y apenas dieron opción a las Irmandiñas, a las que dominaron en el marcador desde los primeros minutos del encuentro. El triunfo de las campeonas fue justo, aunque el apoyo desde las gradas fue para las gallegas, que contaron con los gritos de los anfitriones especialmente. Para llegar a las semifinales, Galicia había vencido con anterioridad a Canadá (13-2).

Derrota en la prórroga

Por su parte, el equipo masculino sucumbió contra Francia en octavos de final, un adversario rocoso y clásico para los gallegos que solo se pudo hacer con el triunfo tras la prórroga (12-14).

Finalizada la competición para los dos representantes de Galicia, en la final de hoy habrá todavía representación galaica, pues Marcos Gañete Corba, actuará de línea en el partido por el título.