La sala Tirant de la Ciudad de la Justicia de Valencia acoge desde ayer el juicio por el presunto amaño del partido que disputaron el Levante y el Zaragoza en 2011. Es un proceso sin precedentes en España, pues es la primera vez que se juzga a jugadores y directivos de diversas entidades por corrupción deportiva. El conjunto maño ganó por 1-2 y consiguió la permanencia en la temporada 2010-2011. El resultado del partido forzó el descenso del Dépor.

Los acusados acudieron a primera hora a los juzgados de Valencia para asistir al juicio. Las vistas empezaron con las cuestiones previas al juicio y las defensas aprovecharon para plantear al juzgado la absolución. La Fiscalía Anticorrupción mantuvo sus acusaciones y ratificará su solicitud de pena: dos años de prisión para cada acusado y seis de inhabilitación para jugadores y exdirectivos, así como una multa para el club maño de más de un millón de euros. Según expuso el abogado que representa los intereses del Deportivo, damnificado por el resultado, la entidad blanquiazul acudirá a la jurisdicción civil una vez se resuelva el procedimiento penal. El objetivo, iniciar otro pleito, esta vez para reclamar una indemnización por los perjuicios causados.

El abogado que representa al Zaragoza aprovechó su intervención para cuestionar la actuación del presidente de la Liga, Javier Tebas. En concreto, pidió la nulidad de su declaración en la fase inicial de la investigación y el resto de diligencias practicadas a raíz de su interrogatorio. Según afirmó el letrado, Tebas señaló que acudió a la Fiscalía después de que un jugador del Zaragoza, cliente suyo, le trasladara el presunto amaño del partido. "Es una gravísima infracción al secreto profesional y al derecho de su cliente a que no se conozca lo que manifiesta en la intimidad, más si le confiesa un delito", repitió la defensa del Zaragoza. Y añadió: "El origen del procedimiento es que un abogado decide prescindir del secreto profesional y denunciar a su cliente". "¿Cómo es posible que este juicio se celebre y que nadie haya frenado esto?", se preguntó.

Además, el letrado aportó al juzgado documentos que acreditarían que existían mecanismos de control adecuados contra la corrupción y que cumplía con los requisitos para formar parte de la siguiente temporada.

En cuanto a las nóminas, la defensa del equipo aragonés trasladó al juez el certificado de la empresa del programa de nóminas del club, así como relación de septiembre de 2011 para esclarecer en qué circunstancias se elaboraron. Aportó esta docuemntación para demostrar que no se falsearon las primas que recibieron los juzgadores.

Las vistas, que se prolongarán en sesiones de mañana y tarde hasta el 30 de septiembre, incluirán el visionado completo del partido presuntamente amañado, si las defensas no renuncian a la práctica de esta prueba. Y es que el enfrentamiento que permitió al Zaragoza mantenerse en la Primera y obligó a descender al Deportivo tuvo muy poco carácter futbolístico y mucho de impostura durante los 90 minutos que duró el encuentro.

Según fuentes de las acusaciones, el primer ataque del Levante no se produjo hasta el minuto 34. De hecho, hubo que esperar otra media hora, hasta el 64 aproximadamente, para que el equipo granota realizara el primer tiro a puerta. Son algunos de los muchos indicios que han recabado las acusaciones tras revisar el partido, incluso asesorados por profesionales del deporte.