Tantos años llamando a las puertas de la elite y quedándose en el umbral que el Compañía de María casi no se cree que por fin, mañana en Mataró, vaya a debutar en la OK Plata. Pero el sueño ya está ahí, servido en bandeja de plata. Y ahora toca disfrutarlo, pero también trabajar para lograr la permanencia en una categoría muy competida en la que con gente de la casa, veteranos y promesas, y un par de fichajes, tiene que afianzar un proyecto que es un regalo para su nutrida cantera.

"Estamos muy bien", dice Alejandro Canosa, su entrenador, para el que también es su primera experiencia en categoría nacional. "Durante la pretemporada hemos probado bastantes cosas y esta saliendo bien", añade y señala "a los mayores" como los que tienen que tirar del carro y "los pequeños", ir sumando poco a poco mientras cogen galones. El técnico coruñés cuenta con prácticamente la misma plantilla que el año pasado, con jugadores consolidados como el portero Diego Lago y Hugo García y Álvaro Rodríguez, la columna vertebral de un equipo al que se le han sumado los refuerzos de Javier Jurado, "con mucha experiencia y un gran jugador de equipo", y el portugués Nuno Paiva, que viene del filial del Porto y que define como "desequilibrante y físicamente muy fuerte".

6

El Compañía de María, preparado para debutar en OK Plata

El resto, jóvenes promesas de la casa lideradas por Tomás Villares, que el año pasado entró en la preselección para el Mundial sub 20. "Confiamos mucho en él, tiene mucho potencial, pero tiene que aprender cómo es la categoría", advierte Canosa. Los porteros Pablo Longueira, Miguel Martínez y Pancho Dumont, así como Álvaro Lamelo, Andrés Miranda, Jorge Ricoy, Santi Miguélez, Sergio Castellanos, Ignacio Sáenz de Buruaga, Álvaro Ferreiro, David Campás y Miguel Fernández "están sumando muchísimo en los entrenamientos y lo harán también en los partidos".

Para el debut de mañana en Mataró el técnico coruñés cree que van un poco a ciegas. "No tenemos muchas referencias reales, así que estamos a la expectativa de lo que nos vamos a encontrar. Contra el Mataró ni siquiera me he enfrentado en categorías inferiores", se lamenta. Pero no se escuda en eso. "Por nuestra cabeza no pasa otra cosa que la permanencia, afianzarnos y coger experiencia para dar salida a nuestros jugadores", responde y opina que será una liga "bastante igualada, sin ninguna cenicienta" por lo que analiza que lo vital será hacerse fuerte en casa: "Juegas en tu pista, duermes en tu cama, sigues tus rutinas, la gente te apoya..."

Un ambiente que espera que se dé en todos los partidos de casa, pero en especial, en los derbis coruñeses para demostrar que "en el resto de España también hay hockey". En liza, tres gallegos, tres madrileños, un asturiano, un valenciano y un extremeño. "Solo competían los mismos porque eran los únicos que podían competir. Ahora se abre el abanico y hay más oportunidades de jugar". Ahora, a aprovecharlas.