Àlex Márquez (Estrella Galicia 0'0 Kalex) se tuvo que conformar con una octava posición en Australia por lo que sus rivales por el título recortaron diferencias y reconoció que le costó "desde el principio". "No pudo ir con ellos ya que hoy eran más rápidos", admitió.

"Ha sido raro entrar por dentro y escuchar motos por el suelo, pensaba que venían por dentro y he levantado la moto y me he cortado un poco, aunque el ritmo del inicio tampoco ha sido brillante", explicó Márquez.

"He hecho más o menos el ritmo que tenía en el warm up, pero no era suficiente, por lo que toca aprender de lo que ha faltado hoy ya que en todas las peleas en las que hemos estado, hemos vuelto a perder mucho tiempo y hay que evitar eso e intentar hacer en Malasia nuestro mejor fin de semana del año", reconoció el piloto de Estrella Galicia 0'0.

En cualquier caso, con las nuevas diferencias en el campeonato, Àlex Márquez no se vino abajo y recalcó que sigue siendo líder, si bien "no era la carrera que esperaba, porque esperaba estar mucho más cerca de Luthi. Con Binder y Martín sí que sabía que aquí tenían un ritmo más fuerte, y a Lecuona se le ha visto venir desde atrás con un ritmo muy rápido".

"Ellos tenían algo más, pero ha faltado estar más cerca de Luthi", esgrimió entonando el mea culpa Àlex Márquez.

Uno de los primeros en ir a visitarlo a su taller tras la carrera fue su hermano Marc, de quien explicó que le dijo que estuviese tranquilo. "Él sabe bien cómo llega uno al 'box' después de una carrera sufrida, así que me ha dicho que mantenga la tranquilidad y que en Malasia irá mejor".

Ayer, en Moto3, el italiano Lorenzo dalla Porta (Honda) no perdonó a sus para adjudicarse la victoria en el Gran Premio de Australia, en el circuito de Phillip Island y proclamarse campeón de la categoría tras salir al asfalto australiano con la clara convicción de conseguir el cetro.