La campanada del Leyma al ganar al Palencia el domingo pasado dejó al conjunto naranja asentado en la quinta posición de la clasificación de la LEB Oro, a solo un triunfo, además, del cuarteto que manda en la categoría„Valladolid, Palencia, Palma y Guipuzkoa„. Los naranjas no estaban tan arriba desde la temporada 2016-17, un curso en el que incluso llegaron hasta la cima de la tabla. La última vez que el equipo coruñés ocupó la quinta plaza „además de esta misma temporada en las jornadas seis y ocho„ fue en febrero de 2017 después de una victoria contra el Barcelona por 93-85. La ilusión se dispara. Pero paso a paso.

En aquel equipo, que venía de hacer el mejor play off de su historia, perdiendo en las semifinales por el ascenso en el quinto partido contra el Melilla, estaba liderado desde el banquillo por Tito Díaz, dirigían Zach Monaghan, Joan Creus y Ángel Hernández como bases; el juego exterior está formado por Filip Djuran, Pablo Ferreiro, Larry Abia, Dago Peña „que abandonó el club por el filial del Barcelona a mitad de temporada„ y Tautvydas Sabonis, mientras que bajo tableros se fajaban Javi Lucas, Josip Mikulic, Gediminas Zyle y Sergio Olmos. El arranque del curso fue espectacular, con victorias frente a Huesca (73-80), Marín (71-65), perder contra Palma (86-73) y encadenar otros cinco triunfos: Araberri (79-65), Barcelona (69-84), Ourense (79-67), Clavijo (85-96) y Burgos (83-76).

Era el 8 de noviembre de 2016 y el Leyma se ponía líder de la LEB Oro. Aunque la racha se agotara una semana después, con la derrota en Cáceres (88-84), los naranjas se mantuvieron siempre en puestos de play off, incluso luchando hasta el final de la liga por esa quinta plaza, que volvieron a ocupar en febrero „jornada 22„, y que les hubiese otorgado la condición de cabeza de serie. Finalmente el equipo coruñés fue sexto y quedó emparejado en cuartos de final con el Palencia. Fue una eliminatoria igualadísima en la que el Leyma dio el primer golpe en ganar en tierras castellanoleonas en el partido inaugural (84-88), aunque después los locales igualaron la serie (92-80). Cuanto esta se trasladó a A Coruña, victoria (104-94) y derrota (101-106) para los de casa, por lo que se decidió todo en un último duelo en Palencia en el que los naranjas perdieron por 83-77.

Contra todo pronóstico, después de una pretemporada en la que el Leyma apenas pudo ganar un partido y de que iniciase la competición con dos derrotas, la llegada de Perris Blackwell para el puesto de pívot apuntaló al equipo porque le dotó de una referencia tanto en ataque como en defensa. Los naranjas esperan partidos contra rivales de arriba para medir sus posibilidades. La victoria contra el Palencia supuso por ello una reafirmación del trabajo realizado. El próximo partido, mañana en Melilla (20.15 horas).