El diez es el número mágico del Deportivo Liceo. Diez victorias en diez partidos, la última, con diez goles. Queda mucho, porque además esta temporada hay play off, pero no puede ser más ilusionante el arranque de la OK Liga de los verdiblancos. Del 0 al 10, estos son los números del equipo de Juan Copa.

0 derrotas en la competición doméstica. El Liceo solo ha perdido en las semifinales de la Supercopa de España, primer partido oficial de la temporada, en el que todavía no había encontrado el ritmo. Y después cayó en la segunda jornada europea contra el Oliveirense, uno de los cinco grandes clubes del momento (con Barça, Sporting, Benfica y Porto) y al que le bastaron con sus individualidades, encarnadas por Jordi Bargalló y Marc Torra, para superar a los coruñeses en el Palacio de los Deportes.

Todos para 1 y 1 para todos. Es el éxito del grupo. Son diez jugadores, pero funcionan como uno solo. Muchos son de fuera, hay muchos viajes, así que hacen piña entre ellos. Hay muy buen ambiente en el vestuario, bromas, apuestas en los entrenamientos...

2 coruñeses en la plantilla. Son David Torres, el capitán, y Martín Rodríguez, uno de los porteros. Ellos son la referencia local, los dos más buscados por los aficionados cuando terminan los partidos y el espejo para los muchos niños de la ciudad, da igual en qué equipo jueguen, que empiezan a subirse a los patines y a agarrar el stick. El primero, con pasado en Santa María del Mar y Cerceda, con paso previo por el Vic, donde fue campeón de la Copa del Rey, antes de regresar a casa. El segundo, estudiante del Liceo de toda la vida, pero que también tuvo experiencias fuera como en el Cerceda y en el Alcobendas.

3 en el cuerpo técnico. Juan Copa está constantemente acompañado por el preparador físico Óscar Viana y por Josep Lamas. El ya exjugador colgó los patines en verano pese a que le quedaba un año más de contrato. Un sacrificio para que se pudiera completar la renovación y regeneración de la plantilla. Desde el otro lado de la valla, aporta su experiencia, con 22 temporadas en la máxima categoría vistiendo la camiseta verdiblanca, y ayuda al técnico coruñés, con el que ya compartió cancha y ahora banquillo.

4 hermanos. De sangre y nacionalidad. Por un lado, los mellizos Di Benedetto, Roberto y Bruno, que ya traían de serie los vínculos con la ciudad. De madre coruñesa y padre italiano, venían todos los años. Además, su hermano mayor Carlo jugó en el Liceo las tres últimas temporadas. Ellos siempre han ido juntos, como un pack indivisible, porque aportan mucho al equipo tanto dentro como fuera. Es la primera vez, sin embargo, que a los Grau, el mayor Carles y el pequeño Marc, les tocaba compartir equipo y la experiencia está siendo inolvidable. Por otro lado, están los cuatro argentinos, Maxi Oruste, Franco Platero, Fabrizio Ciocale y Facundo Bridge, una pequeña comunidad que los hace sentirse casi como en su tierra.

5 victorias en casa y fuera. El cinco es el número del término medio. En este caso indica que los verdiblancos se encuentran cómodos tanto en su pabellón como lejos de él. Más, evidentemente, en su feudo, con 34 goles a favor y 6 en contra por los 17 y 8 cuando le toca jugar a domicilio. Los partidos en el Palacio de los Deportes de Riazor, además, tuvieron como aliciente la campaña solidaria de David Torres, con cuatro homenajeados: el cáncer de mama, una protectora de animales, la salud masculina y una entidad que protege a los niños en África.

6 fichajes. La temporada pasada acabó con la salida de la columna vertebral del equipo, muchos de los jugadores que en los últimos años habían llevado al equipo a las cotas más altas como Xavi Malián, Eduard Lamas, Sergi Miras, Carlo di Benedetto y Marc Coy. Después se supo que a ellos se les unía Josep Lamas. Así que el club tuvo que hacer un esfuerzo para fichar y hacerlo además de forma inteligente. Hermanos, jugadores que se conocían, que ya habían estado juntos... llegaron seis (Carles Grau, Franco Platero, Roberto di Benedetto, Maxi Oruste, Marc Grau y Bruno di Benedetto) y la duda era cuánto tardarían en acoplarse. Desde el minuto uno se trabajó en ello, con el hándicap de que el equipo prácticamente no pudo disputar amistosos. Con menos rodaje llegó a la Supercopa de España, un punto de inflexión a partir del cual se desató la conjura verdiblanca.

7 meses quedan por delante. Es una temporada muy larga, hay play off. Así que hasta junio no se resolverá la competición. Solo van cuatro desde que en agosto arrancó la pretemporada, tres de competición oficial. El próximo finalizará la primera vuelta, a la que quedan tres jornadas. En abril acabará la fase regular para dar paso al play off, que tendrá cuatro eliminatorias: octavos de final (solo para del séptimo al décimo), cuartos de final, semifinales y final, al mejor de cinco partidos.

8 jugadores que han marcado. La rotación es uno de los grandes secretos del Liceo de esta temporada. Los ochos jugadores tienen protagonismo, cada vez más porque además Fabrizio Ciocale, que era el último en salir desde el banquillo, está cogiendo confianza y tiene más minutos. Los ocho también han estrenado su casillero goleador. El pichichi es Marc Grau, con 14. Le siguen David Torres (12); Maxi Oruste (5); Franco Platero (5); Roberto di Benedetto (5); Facundo Bridge (4); Fabrizio Ciocale (4) y Bruno di Benedetto (2).

El público, el jugador número 9. Los jugadores del Deportivo ya no están solos. Si bien la mejor entrada fue la del estreno contra el Barcelona, el Palacio de los Deportes de Riazor presentó a lo largo de estos cinco encuentros un gran aspecto. La afición crece y cada vez el público se engancha con un equipo que le hace disfrutar y con el que conecta.

10, matrícula de honor. La nota. No se le puede pedir más al equipo. Aunque ellos no se cansan de repetir que este no es su techo. Todavía pueden hacerlo mejor. Están en fase de construcción. Lo mejor está por llegar.