El presidente de la Fórmula 1, Chase Carey, confirmó ayer que el Mundial comenzará el 5 de julio con el Gran Premio de Austria, después de la suspensión del GP Francia, que debía disputarse a finales de junio y se convirtió en la décima carrera afectada por el coronavirus.

"Nuestro objetivo es comenzar a competir en Europa en julio, agosto y principios de septiembre, y la primera carrera tendrá lugar en Austria del 3 al 5 de julio. Septiembre, octubre y noviembre competiríamos en Eurasia, Asia y América, y la temporada terminaría en Baréin y Abu Dabi, completando entre 15 y 18 carreras", dijo Carey.