El director del Australian Open, Craig Tiley, explicó ayer que manejan "cuatro escenarios" diferentes para la próxima edición del torneo, previsto para enero de 2021, y que uno de ellos es la cancelación completa debido al coronavirus.

"El peor de los casos es que no haya. Nuestro mejor escenario en este momento es un torneo con jugadores a los que podamos acoger con técnicas de cuarentena y únicamente con aficionados australianos", avanzó Tiley.

El primer Grand Slam de la temporada se celebra en la segunda quincena de enero. El tenis lleva paralizado desde marzo y así seguirá al menos hasta mediados de julio, pero hay muchas dudas sobre si se volverá a jugar hasta 2021. Roland Garros ya trasladó su fecha tradicional de mayo a septiembre. Wimbledon ha sido cancelado y el US Open todavía está programado para finales de agosto.