El ciclista belga Remco Evenepoel (Deceuninck-Quick Step) se proclamó vencedor de la Vuelta a Burgos después de defender ayer su liderato en la quinta y última etapa, de 158 kilómetros entre Covarrubias y las Lagunas de Neila, en la que el colombiano Iván Ramiro Sosa (Ineos) reinó por delante del español Mikel Landa (Bahrain McLaren) y del propio campeón.
El de Aalst, de solo 20 años y que vestía el maillot morado desde su exhibición en el Picón Blanco en la tercera etapa, se adjudica la primera cita ciclista de la temporada, interrumpida durante meses por la pandemia de coronavirus, al dominar la general de la prueba burgalesa con 30 segundos de ventaja sobre Landa, que subió un puesto hasta la segunda posición. El podio final lo completó el portugués Joao Almeida (Deceuninck-Quick Step), a 1:12.
Mientras, la gloria del último día fue para el colombiano Iván Ramiro Sosa, el primero en completar el final en alto de categoría especial en las Lagunas de Neila, un tramo de 4,2 kilómetros al 11 por ciento.
La escapada inicial, formada entre otros por los españoles Dani Navarro (Israel Star-Up Nation), Ángel Madrazo (Burgos BH) y Gotzon Martín (Euskaltel-Euskadi) y que llegó a gozar de hasta seis minutos, fue neutralizada a falta de 15 kilómetros, ya superado el Alto del Collado. Evenepoel se dedicó entonces a defender su ventaja al frente de la clasificación y se escapó junto a Sosa y Landa. El colombiano lanzó un último ataque que le permitió entrar en meta con nueve segundos de ventaja sobre el vasco y 11 sobre el belga.
