El dos veces campeón del mundo de Fórmula 1, el piloto español Fernando Alonso, completó su tercera participación en las 500 Millas de Indianápolis y no pudo pasar del vigésimo puesto en una lista de 33 coches. El veterano piloto japonés Takuma Sato fue el ganador de la carrera tras superar al neozelandés Scott Dixon y lograr su segunda victoria en el mayor espectáculo automovilístico de Estados Unidos.

Aunque recuperó cinco puestos desde el 26º que tuvo en la línea de salida, Alonso nunca pudo ser competitivo con su Chevrolet N. 66 Ruoff Arrow McLaren SP, aunque sí hizo una buena carrera. Uno de los que sufrieron las consecuencias de chocar su vehículo fue el joven piloto español de 23 años, el novato Alex Palou, quien estaba en el noveno puesto cuando en la vuelta 121 chocó a la entrada de una curva con su Honda Dale Coyne Racing con el equipo Goh, y tuvo que abandonar.

En su análisis, Fernando Alonso indicó que "fue una carrera muy ajetreada para nosotros. No tuvimos ni una vuelta de bondad, digamos. Sufrimos desde el principio con el equilibrio del coche, con mucho sobreviraje. Seguimos cambiando el equilibrio en las paradas, reduciendo el flap delantero, haciendo ajustes en los neumáticos y entonces empezábamos a estar contentos con el coche. Estábamos en 15ª posición alrededor de la vuelta 110, que es donde queríamos estar", indica el asturiano.

Pero entonces llegaron los problemas con el embrague. "Pasamos la mitad de la carrera yendo del 26º al 15º y luego, tuvimos un problema de embrague en el coche que no sabíamos cómo solucionar. Terminamos la carrera sin el embrague, así que en ese aspecto en cada parada teníamos que empujar el coche, meter la marcha y salir. Eso nos costó una vuelta y desafortunadamente, nos mantuvimos una vuelta por detrás hasta el final y no pudimos lograr nada más". En su análisis, el español también saca una lectura positiva: "Estoy contento de acabar la carrera, de cruzar la meta y de tener unas 500 Millas en mi bolsillo, eso es lo positivo. Lo negativo es que nos quedamos fuera de la batalla muy pronto con el problema de embrague. De todas formas, creo que el equipo Arrow McLaren SP estuvo fantástico durante la carrera. La suerte no estuvo con nosotros, pero estoy orgulloso del esfuerzo de todos en el equipo".