La ilusión en España tiene una posición, la de extremo, y un perfil poco recurrente en los éxitos recientes. Lo que aportan Ansu Fati y Adama ha concentrado las prioridades de Luis Enrique en buscar el desequilibrio desde la banda. Una fiesta a la que están apuntados también Dani Olmo y Ferrán Torres.

El seleccionador, que había dicho que a todos les gustaría tener un gran delantero al estilo Van Basten, ayer quiso cerrar filas en torno a sus seleccionados y a sus propias ideas: "Prefiero lo que tengo a un jugador de 30 goles que condicione todo lo que trabajamos para el equipo", sentenció para los titulares. "Mi objetivo es potenciar a los míos. Si tuviéramos ese delantero, lo explotaríamos, pero tenemos lo que tenemos y yo estoy encantado", explicó después.

Lo que tiene entre manos es la eclosión en la selección de dos portentos, Adama y Ansu, cada uno en lo suyo, a los que la afición quiere en el once. "Todos pueden jugar juntos, no hay jugadores incompatibles", dijo Luis Enrique con un tono generalizador que no augura la coincidencia de los dos canteranos del Barcelona esta tarde ante Suiza. Es el regreso de la Liga de Naciones, esa competición metida con calzador en la temporada de la pandemia y que sirve, al menos a Luis Enrique, para engarzar su equipo camino a la Eurocopa.

Con Mikel Oyarzabal disponible, negativo en la última tanda de test, Luis Enrique insistió en su halago casi permanente a Adama: "No solo tiene velocidad y físico, también es habilidad, potencia, fuerza, capacidad para aguantar el balón? Un perfil así es difícil encontrarlo a este nivel", dijo.

Cuando habló del otro fenómeno, un Ansu sin minutos en el amistoso y fijo en el once hoy, fue más comedido, consciente de la avalancha de elogios que rodea al atacante del Barça. "Son jóvenes, tienen toda una vida para desarrollarse. Solo tienen que tener la humildad y la tranquilidad de querer mejorar cada día", comentó haciendo extensible su reflexión a todos los jóvenes de la selección.

En el lado opuesto está Busquets, máximo exponente de los veteranos que aguantan. Tiene el relevo de nivel asegurado, pero no el momento del traspaso de poderes. "Si sigue a su nivel va a seguir", observó aséptico el entrenador de la selección.

Después del amistoso del pasado miércoles ante la campeona de Europa Portugal, España volverá a la acción oficial defendiendo el liderato en en el Grupo 4 de la Liga 1 y en busca de tres puntos que le sigan acercando a la clasificación de la Final Four de la nueva competición de la UEFA.

Los suizos, con una plantilla en renovación de cara a la Eurocopa pospuesta a 2021, no están ofreciendo su mejor fútbol en las últimas semanas, y en la Liga de Naciones ocupan el último lugar del grupo tras perder ante Ucrania (2-1) y empatar en casa frente a Alemania (1-1). La historia juega en su contra, ya que de los 20 partidos que han disputado contra España ha perdido 15 y sólo vencieron en una ocasión, aún reciente en la memoria en el mal debut de la roja en el Mundial 2010 en el que coronarían campeones.

Luis Enrique advirtió del peligro que tiene Suiza pese a llegar a Madrid como colista de grupo. "Es una selección muy peligrosa que ha merecido mucho más en los dos partidos de Liga de Naciones. Es un equipo muy atrevido en ataque y defensa, que sale jugando desde atrás sin problema y que le encanta hacer situaciones de presión", explicó.