Los hermanos Di Benedetto son ya son una institución en el mundo del hockey sobre patines. Los tres han pasado por el Liceo. Primero Carlo, ahora en el Porto. Y después los mellizos Bruno y Roberto. Ahora solo queda en el equipo verdiblanco el último después de la salida de Bruno para el Lleida. No queda mal representada la familia y así los ha demostrado en la primera jornada, con seis goles en el partido contra el Taradell. No se conforma. Donde quiere brillar el francés es en los partidos importantes, como el de mañana en el Palau Blaugrana contra el Barça (19.00 horas).

¿Echa de menos a su hermano mellizo Bruno? Es la primera vez en su vida que juegan separados.

Lo llevamos bien. Él cogió la mejor opción para él y sabíamos que algún día iba a pasar como también pasó con Carlo. Él está contento allí, tiene un buen proyecto.

El destino le quiso volver a cruzar con Carlo en la Liga Europea en el partido contra el Porto. Pero con la lesión, tendrán que esperar un poco más para ese duelo fraternal.

No, Carlo no llega para noviembre. Está recuperándose y empezará con la rehabilitación cuando le quiten el yeso. Serán sobre dos meses, dependiendo de como le responda el tobillo.

Ya van dos de tres fracturas en la familia.

Bruno todavía no se ha roto nada. Yo me rompí el maléolo y la tibia en la final de la Copa CERS con el Lleida. Tuve el hueso en roto en dos y Carlo no, pero igualmente tuvo que pasar por el quirófano. La verdad es que me recuperé rapidísimo porque me operaron el 1 de mayo y el 15 de julio ya estaba jugando aquí el Europeo con Francia.

¿Siente que tiene que dar un paso adelante en su segundo año en A Coruña?

El año pasado ya me ficharon para que tuviese un papel importante, pero sí que es verdad que éramos muchos nuevos, había que acostumbrarse al equipo... siempre el segundo año es mejor porque ya conoces mejor el juego. Con la continuidad tengo que seguir siendo un jugador importante y responder cuando lleguen los partidos importantes, que son contra los equipos de arriba, que es donde se te va juzgar.

¿Qué ha cambiado?

Ya tenemos cada uno nuestro papel y sabemos que vamos a tirar juntos hacia arriba. Eso hace que el hecho de ya conocernos, ser un buen equipo y tener una buena relación entre nosotros, me da más confianza a la hora de jugar.

¿Sabía que los seis goles contra el Taradell son un récord en la historia de la OK Liga?

Al final es solo una cifra. Lo importante será hacerlo también contra los equipos grandes.

¿Se refiere al partido de mañana contra el Barcelona?

Es un partido importante, de esos para los que jugamos al hockey sobre patines, complicado y difícil, pero lo mismo va a ser para ellos. Son nueve jugadores top, en su pista se sienten más cómodos y nosotros vamos con nuestras cartas y esperamos volver con puntos.

¿Les pilla demasiado pronto, en la jornada 3?

En una liga tienes que jugar contra todos así que da igual. A mí sí que no me hubiese gustado en la primera jornada. Aunque este año empezamos el 20 de julio la pretemporada y tuvimos tiempo de rodarnos para llegar al inicio en forma. Que te llegue en la tercera o en la decimoquinta jornada da igual. Hay que jugar y yo creo que además nos viene bien.

¿El hecho de que sea a puerta cerrada les puede beneficiar?

Allí siempre hay gente para tampoco es un público que se te eche encima como en Reus o en Noia. A ellos sí que les quitará algo, pero a nosotros no creo.

¿Tiene algún punto débil este Barça de los récords?

Sí, pero aquí no lo puedo decir.

¿Será un partido de defensas o de ataques?

Contra el Barça nunca son partidos de 9-8. Tienen dos porterazos, igual que nosotros. Pasará por la defensa, como en todos los partidos importantes. Y en estar acertado en las ocasiones que tengamos. No sé cómo será el marcador, pero sí sé que tendremos que defender muy fuerte y estar acertados.

¿Se puede esperar algo grande de este Liceo?

Eso espero. Estamos trabajando para eso. Creo que se está preparando algo grande. Ya estábamos bien el año pasado. Este, lo mismo o incluso mejor.