No es momento (aún) de ponerse nervioso y menos un tipo como Joan Mir (Suzuki), que ha nacido en la isla de la calma. No es momento de perder la paciencia y, sobre todo, la ilusión, la esperanza, el coraje y la determinación. Está difícil, ¡claro que está difícil!, pero para todos, sí, sí, también para el gran favorito del Gran Premio de Francia, el francés Fabio Quartararo (Yamaha), que hoy (13.00 horas, DAZN), liderará, por tercera vez en este curioso e incierto Mundial exprés, la parrilla de salida de la categoría reina, tras haberse coronado en casa con una vuelta de locura.

Es el pulso que viene. 108 puntos contra 100. El Diablo contra el ángel Mir. Yamaha contra Suzuki. Dos seminovatos que compartieron equipo cuando empezaban en esto en Moto3 y que reconocen que "aquellos tiempos no tienen nada que ver con estos".

Mir sabe que está en casa de Quartararo y sabe que, de nuevo, ha fallado en la quali del sábado, pues tan solo logró el 14º mejor tiempo, lejos, muy lejos, de la primera fila, "el sitio ideal para arrancar si es que quieres meterte en el podio".

Y es que Mir es quien más podios ha logrado (cuatro) en las cinco últimas carreras. "Esta vez, de verdad, no me veo en el podio. No acabo de ir cómodo con la moto. Me caigo cada vez que pruebo algo y, lo peor, no sé por qué me caigo. Es difícil tener confianza cuando te pasan estas cosas y más afrontando, con cierto respeto, que no es temor, la primera curva de izquierdas, donde llego a perder casi medio segundo. Espero que en el warm-up (ensayo de 15 minutos, previo a la carrera del domingo), podemos encontrar alguna solución para la carrera", contaba ayer tras la clasificación el piloto de Suzuki.

Quartararo, mientras tanto, se marcó un vueltón de cine y liderará la parrilla ante un agresivo Jack Miller (Ducati) y un renacido Danilo Petrucci (Ducati), que llevaba más de un año sin aparecer en la primera fila de una parrilla de la categoría reina de MotoGP.