El Sevilla se llevó los tres puntos en su partido frente al Rennes gracias a un gol de Luke de Jong en la segunda mitad de la segunda jornada de la Liga de Campeones, un tanto que acabó con la sequía del conjunto andaluz, que llevaba 270 minutos sin ver portería.
El equipo de Julen Lopetegui consiguió un triunfo muy importante para esclarecer su futuro en la máxima competición europea. Los andaluces no fallaron ante el Rennes, subcampeón francés, aunque tuvieron que esperar casi hasta la hora de partido para conseguir el único tanto del encuentro en botas de De Jong.
El Sevilla gozó de 22 llegadas, 16 ocasiones claras y dominó la posesión ante un rival que echó de menos a Camavinga, su mejor jugador en el centro del campo, y que terminó pagando cara su conservadurismo. La primera ocasión del Rennes llegó en el minuto 70 con una falta de Grenier.
Hasta entonces, el seis veces campeón de la Europa League dominó por completo todas las facetas del juego. Ocampos, que cuajó una gran primera parte, fue el primero en intentarlo con un disparo desde la frontal y Munir dio continuidad al peligro generado con una volea que se estampó en el larguero. Diego Carlos se sumó al carrusel de oportunidades con un cabezazo magnífico y Koundé también probó fortuna.
Los de Lopetegui no cambiaron el guion en la segunda mitad y acabaron encontrando las redes en el minuto 55. Un gran centro de Acuña desde el costado izquierdo fue empalado por De Jong en el área. El gol fue inapelable. El Sevilla buscó el segundo sin suerte.
