El base español Ricky Rubio no jugará finalmente la próxima temporada de la NBA en Oklahoma City Thunder, sino que lo hará en el que fue su primer equipo en la liga estadounidense, Minnesota Timberwolves, un proyecto atractivo con jugadores como Karl-Anthony Towns, D'Angelo Russell y el número uno del draft, Anthony Edwards.

Está siendo una semana ajetreada para el director de juego catalán, que el pasado lunes se vio envuelto en la operación de Phoenix Suns, su franquicia de la pasada campaña, para hacerse con los servicios del estelar Chris Paul. El de El Masnou se marchó a los Thunder, pero la noche del miércoles, marcada por el draft, según informaron ESPN y The Athletic, le deparó un nuevo destino, los Wolves, que le trajeron de vuelta junto a las elecciones 25 y 28, a cambio de enviar a Oklahoma al número 17, Aleksej Pokusevski.

De este modo, Rubio volverá al que fue su primer equipo en la NBA, que le eligió en la quinta posición del draft de 2009, aunque no llegó a Minnesota hasta la temporada 2011-12 tras jugar las dos campañas anteriores en las filas del Fútbol Club Barcelona.