El Valencia se reencontró con la victoria en Zorrilla, tras ocho jornadas sin conseguirla, al imponerse a un Valladolid que no halló capacidad rematadora y que, a pesar de haberse mostrado serio en defensa, no tuvo la suerte de su parte.

El conjunto de Javi Gracia salió con mucha intensidad e imprimió velocidad por las bandas para tratar de sorprender al conjunto blanquivioleta, lo que se tradujo en peligrosas llegadas de los jugadores ché, con un Maxi especialmente activo, favorecidas por los desajustes en el centro de la defensa local.

A pesar de ese mayor empuje ofensivo de los valencianos, se llegó al descanso con el 0-0 inicial. Una igualdad que el Real Valladolid salió decidido a romper tras la reanudación, buscando recuperar la valentía en ataque, con Weissman como gran protagonista en ese reinicio del choque.

Pero no tardó el cuadro visitante en volver a mostrar la mordiente ofensiva. Al final, tanto fue el cántaro a la fuente que Soler inauguró el marcador en el José Zorrilla, gracias a un potente y seco disparo que Masip no tuvo opción.