Llegó enero, el mes de las rebajas, y los directores deportivos ya se mueven en busca de ese refuerzo que pueda aliviar parcelas desiertas. El problema también suele ser común en el actual contexto: no hay dinero.

Un central es la prioridad del Barcelona, seguido de un delantero. Eric Garcia y Memphis Depay son los deseados. Aleñá ya se fue al Getafe, en el que coincidirá con Kubo, invisible para Emery enVillarreal. Puig, Matheus y Junior tienen la puerta abierta, sin ofertas.

En el Madrid, mientras, no se prevén entradas. Zidane salvó el cuello con su vieja guardia y seguirá con su bloque. Sí podría haber salidas, con Isco, Odriozola y Jovic. El malagueño ha pedido irse para jugar la Eurocopa. Juventus, City y Nápoles le quieren, pero prefiere el Sevilla. El club blanco pide 50 millones. Una cesión es la fórmula más posible. Igual ocurre con el punta serbio y el lateral vasco.

El líder de la Liga también tiene una vacante clara. Diego Costa rescindió su contrato con el Atlético y ha dejado a Luis Suárez como único ariete. El club rojiblanco no quiere gastar más de 20 millones. En España se puede fichar por el 25% de la masa salarial que se libere. Si el punta hispanobrasileño cobraba ocho millones el recambio no podrá percibir más de dos. Los hinchas colchoneros quieren a Raúl de Tomás, pero el Espanyol no facilitará su salida. Se habla de acuerdo por Moussa Dembélé, del Olympique de Lyon. Milik, que acaba contrato con el Nápoles, y Willian José, de la Real, son otras vías.

En el resto de la Liga, necesidades del Celta aparte, el Villarreal fichó a Capoué, mediocentro procedente del Watford, para cubrir la lesión de Iborra. El Betis busca un central para frenar la sangría. El Valencia ha tanteado al central Ferro (Benfica) y a los centrocampistas Winks (Tottenham) y Eriksen (Inter), que será uno de los protagonistas de esta subasta invernal.

El danés, que apenas juega con Antonio Conte, forma parte de la lista de Mauricio Pochettino para reforzar al PSG, el único club que puede animar de verdad esta ventana de fichajes. El argentino conoce bien al mediapunta de su anterior etapa en el Tottenham, en el que también dirigió a Dele Alli, otro deseo. Incluso ha sonado Dybala, que está participando menos de lo que desearía con Pirlo. La Juventus, al mismo tiempo, persigue otro delantero. El técnico italiano aseguró que no tiene suficiente con Morata y Cristiano. Tampoco vería mal un punta Guardiola ante las lesiones habituales de Gabriel Jesús y Agüero, que acaba contrato este año.

Más atrás mira el Liverpool, que sufrió la grave lesión de Van Dijk, a la que se añadieron los problemas físicos de Joe Gómez y Matip. Upamecano, del Leipzig, es el preferido de los reds, pero parece más cerca del Bayern, en el que Javi Martínez y Alaba acaban contrato en 2021. Boubacar Kamara (Marsella) y Omar Richards (Reading) también están en la agenda alemana. Garay, agente libre, sigue en el escaparate como opción barata.

La primera semana de mercado ya ha dejado operaciones destacadas. La más alta se cerró ayer con la llegada de Sebastien Haller al Ajax. El club holandés se ha gastado 22,5 millones en el punta francés de 26 años, el fichaje más caro de su historia. El centrocampista húngaro Dominik Szoboszlai reforzó al Leipzig, que pagó 20 millones al Salzuburgo. El Manchester United ha invertido 21 kilos en Amad Diallo, extremo del Atalanta, el equipo del Papu Gómez, que vive un cisma con el técnico Gasperini. El Milan y el Inter pugnan por él, tasado en 17 millones.

Otra salida destacada es la de Mesut Özil, que no contaba para Arteta en el Arsenal. El mediapunta, el mejor pagado de los gunners, jugará en el Fenerbahce. Otro exmadridista, Sami Khedira, podría reencontrarse con Mourinho en el Tottenham o Ancelotti en el Everton. El mediocentro acaba contrato este año y Pirlo no lo quiere.

El mercado invernal del año pasado se cerró con un gasto de 886 millones en la grandes Ligas europeas, con la Premier (227) a la cabeza. Bruno Fernandes, el centrocampista del United, fue el fichaje más caro de un plazo que también trajo la llegada de Haaland al Dortmund. El mayor boom se produjo en enero de 2018, cuando se superaron los 1.000 millones en traspasos históricos como los de Coutinho (de Liverpool al Barça) y Van Dijk (del Southampton al Liverpool). Si no hay sorpresas, las cifras de este ejercicio quedarán muy lejos de esa vorágine.