Ousmane Dembele despertó a Francia en su camino hacia el Mundial de Catar y encarriló la primera victoria de su selección en la fase de clasificación en Nur Sultan ante la modesta Kazajistán (0-2).

Tras el tropiezo en París en el estreno contra Ucrania, el conjunto de Didier Deschamps confirmó los pronósticos a 5.000 kilómetros de casa. Lo hizo con un once profundamente renovado respecto al encuentro de Saint Denis y con un Dembele que, en estado de gracia, como en el Barcelona, marcó las diferencias.

El técnico galo planteó una defensa y un medio del campo totalmente diferente, con Dubois, Zouma, Lenglet y Digne atrás, y Paul Pogba y Tanguy Ndombele en la medular. El también barcelonista Griezmann, autor del tanto contra Ucrania, se mantuvo en el equipo y le acompañaron el atlético Lemar, Martial y Dembele.

Tras un control orientado prodigioso a los ocho minutos, Dembele empezó a decantar la contienda con un certero disparo tras recibir el balón de Martial. Francia sentenció el choque antes del descanso con un autogol de Sergei Maliy.

Inglaterra, por su partes, sigue firme en su camino a Catar y logró este domingo su segunda victoria en el grupo I ante Albania gracias a los goles de Harry Kane y de Mason Mount (0-2).

Kane, que no disputó ni un solo minuto ante San Marino, se desquitó abriendo el marcador y recortando su diferencia con Wayne Rooney como máximo goleador histórico de la selección. El delantero del Tottenham suma ya 33 tantos.