El Rayo Vallecano accedió a la final por el ascenso a Primera con la victoria (1-2) ayer en la vuelta de las semifinales del play off ante el Leganés, un choque con fe en descenso en los de Butarque, tras el 3-0 de la ida.

El cuadro vallecano tenía los deberes casi terminados después de la goleada hace tres días. El tramo final de ese encuentro, con el doblete de Bebé, fue la sentencia para un Lega que lo intentó, con el ánimo de la afición pepinera de vuelta a su grada. Los de Asier Garitano cumplieron con el manual de la remontada, que comienza por marcar pronto. Rober Ibáñez hizo ese tanto de motivación a los 10 minutos, pero no tuvo más acierto el cuadro local pese a las ocasiones. Tras el descanso, el Rayo se puso las pilas, empató con gol en propia de Sergio González y remató la faena a la contra con Andrés Martín.

Alta intensidad

El derbi madrileño tuvo la intensidad de lo que había en juego, pero el paso de los minutos recordaba para bien o para mal ese 3-0. El Lega fue otro equipo distinto al inofensivo de la ida, solidario y vertical, con balones largos a Miguel, amarillas para los dos centrales rivales y varias intervenciones de Luca Zidane.

Una gran jugada de los locales, por banda izquierda en el centro de Jonathan Silva, supuso el 1-0 que encendió Butarque. El partido se trabó algo más en faltas y reclamaciones al árbitro, y el Rayo logró sacar al rival de su campo.

Tras el descanso, los de Iraola comprendieron que o mejoraban o al menos apretaban o el Lega confirmaba el susto. Más activo el Rayo, el cuadro pepinero tuvo más difícil encontrar ocasiones. Las acciones de Rubén Pardo animaron de nuevo al ataque local, también con Rober Ibáñez como protagonista en un remate desviado.

Los cambios dieron aire al Leganés, igual que el meta Riesgo apareciendo bajo palos, pero entonces llegó el 1-1, en una falta del Rayo que remató sin querer a portería Sergio. Con 1-4 en el global, el Lega no tuvo ni fe ni fuerzas y el Rayo sentenció a la contra con Andrés Martín su cita con el Girona por el regreso a la elite.