Max Verstappen consiguió su sexta pole de la temporada y abrirá la parrilla del Gran Premio de Bélgica (15 h.), 12ª cita del calendario. El piloto neerlandés, que perdió el liderato del Mundial en Hungría, aspira a recuperarlo en un escenario de máxima dificultad, Spa-Francorchamps, que asistió a una lucha de infarto, marcada por la lluvia y un fortísimo accidente de Lando Norris, que está fuera de peligro.

La batalla por la pole comenzó con un retraso de 15 minutos debido a la fuerte lluvia que azotaba el circuito de las Ardenas justo antes de la sesión de clasificación. Norris fue el mejor cuando la lluvia dio un respiro, con Hamilton y Bottas pegados a su estela. Los dos Mercedes sufrieron al límite para conseguir el acceso a la Q3. Los que no pudieron remediar su eliminación prematura eran los dos Ferrari de Leclerc y Sainz y un Fernando Alonso que lo intentaron hasta el final, sin éxito. Saldrán 12º y 14º respectivamente.

El definitivo pulso por la pole se desarrolló con la lluvia arreciando en el tramo final de una estresante sesión. Norris protagonizó un escalofriante accidente después de destrozar su McLaren. Vettel se detuvo junto al coche del inglés para comprobar que estaba a salvo y protestó a dirección de carrera por no haber mostrado bandera roja antes. “Esto era innecesario”, dijo el alemán.