El Real Madrid consiguió cerrar la herida abierta que su entrenador, Carlo Ancelotti, admitió que tenía tras ser eliminado la pasada temporada por el Alcoyano y en esta ocasión se impuso por 1-3 al conjunto alicantino, que plantó cara pero vio cómo en un fatídico y desafortunado minuto se le escaparon sus opciones de luchar por entrar en los octavos de final de la Copa del Rey.

El Alcoyano afrontó el partido con mucho atrevimiento, con una fuerte presión adelantada y llegando con claridad a los dominios de Lunin, al que Dani Vega puso a prueba cuando apenas habían transcurrido tres minutos de juego. En el posterior saque de esquina pudieron adelantarse los locales tras una doble ocasión en la que finalmente Camavinga, de cabeza, impidió el 1-0.

El Real Madrid, sin Modric ni Kroos, naufragó en la medular ante el ímpetu de su rival, que no dejaba que los hombres del medio campo del equipo blanco pudieran conectar con los de ataque. Por contra, el Alcoyano abría bien el campo y seguía llegando con peligro.

Un saque de esquina en el tramo final del primer tiempo permitió al Real Madrid adelantarse en el marcador. Marcó Militao, de cabeza, en el primer remate madridista entre los tres palos. En la segunda parte mejoraron las sensaciones en el Madrid, que con el marcador a favor ya no se sintió tan sometido como en el primer tiempo. La temprana lesión de Mariano dio entrada en el partido a Asensio y los de Ancelotti ganaron en control del juego y profundidad.

Vicente Parras buscó revolucionar el partido con un triple cambio en busca del empate con media hora por delante. Pero el que revolucionó el choque fue Dani Vega, que, en una espectacular acción personal, empató en el minuto 66..

El fantasma de los sucedido la pasada temporada comenzaba a sobrevolar El Collao. Sin embargo, en apenas un minuto y con una gran dosis de fortuna, el Real Madrid resolvió la eliminatoria. Primero, Asensio puso el 1-2 después de que su remate golpeara en el central Carlos Blanco y casi a continuación, el recién salido Isco aprovechó una desafortunada acción de la defensa local y provocó en una curiosa acción el gol en propia puerta del portero José Juan. El 1-3 dejó el partido sentenciado.