El Real Madrid rescató un empate (2-2) en el descuento en un partido loco en el que se señalaron tres penaltis, se lanzaron dos y se falló uno. Un encuentro en el que el Elche ganaba 0-2 a un cuarto de hora y un duelo en el que los de Ancelotti volvieron a sufrir de lo lindo ante un rival con mucha personalidad y un jugador sobresaliente, su delantero Lucas Boyé.

Partido raro en el Bernabéu. Para empezar por el horario de sobremesa, poco habitual en Chamartín, que arrancó homenajeando merecidamente a Paco Gento. Leyenda que hizo grande a los blancos en Europa y en España batiendo récords de títulos. Testigo privilegiado fue el Elche, equipo que ya complicó a los de Ancelotti el pasado jueves en Copa. Rival de buen pie, orden y jugadores notables en las dos áreas.

Penalti fallado

El Real Madrid cocinó a fuego lento el partido con Hazard en el once. Dominó, creó, llegó... pero no acertó. Badía estaba acertado en la portería y en ataque Boyé no se arrugó con Militao Alaba. La deriva invitaba a pensar en un triunfo local, especialmente cuando el colegiado señaló penalti sobre Vinicius pasada la media hora de partido. Pero Benzema lo tiró fuera y a Ancelotti torció el gesto. Mucho más cuando diez minutos más tarde Fidel regaló un centro delicioso al área madridista que Boyé descolgó con un testarazo a la red. Se complicaba la tarde ante un adversario aseado y punzante.

La segunda mitad comenzó con el Elche tocando y haciendo muy ancho el campo para centrocampistas que no saben presionar como Modric, Kroos o un intrascendente Hazard. Más raro fue aún lo que pasó en el minuto 50, cuando el árbitro dio un susto monumental a los ilicitanos al señalar un penalti surrealista sobre el belga. Sin embargo, el VAR le abrió los ojos y se desdijo para tranquilidad visitante. La tarde seguía torcida. Especialmente cuando Benzema se dirigió al banquillo y pidió el cambio con problemas musculares. Carletto se lamentaba en la banda.

Benzema chuta en el penalti que falló ante el Elche. Rodrigo Jimenez

Inoculó el técnico italiano más agresividad a los suyos con un cambio de esquema, del 4-3-3 al 4-2-3-1, con Rodrygo Vinicius de extremos y Hazard por detrás de Jovic. A veinte minutos del final los blancos asediaban al Elche, pero no acumulaban ni un triste remate entre los tres palos en la segunda parte. De hecho el primer remate a puerta fue de Boyé en el 72, pero Courtois estaba en el sitio. Goteaban los minutos y la impaciencia consumía a la grada y a los madridistas, más densos que de costumbre. Sin fútbol se aferraban a la épica.

Empate in extremis

Entonces Boyé salió de un regate y sirvió a la izquierda, donde Pere Milla recibió para cruzar raso batiendo a Courtois. La tarde se complicaba definitivamente para el Madrid ante un Elche que no ganaba a los blancos desde 1978. Pero cuatro minutos después un córner tropezaba en el brazo de Milla, algo que delató el VAR De Burgos convirtió en penalti que, esta vez sí, el Madrid rentabilizó anotando la pena máxima Modric. El Madrid se marchó arriba con todo abrazado a la épica y Militao pescó un centro en el descuento para empatar un partido complicadísimo. Respiraba Ancelotti aliviado con la igualada final. Un empate raro.

Ficha técnica:

2 - Real Madrid: Courtois; Lucas Vázquez (Valverde, m. 78), Militao, Alaba, Mendy; Casemiro, Kroos (Rodrygo, m.63), Modric; Hazard (Isco, m.78), Benzema (Jovic, m.57) y Vinicius.

2 - Elche: Édgar Badía; Palacios, Gonzalo Verdú, Diego González, Mojica; Tete Morente (Fidel, m.23), Gumbau, Raúl Guti, Pere Milla; Lucas Pérez y Lucas Boyé (Josan, m.87).

Goles: 0-1, min. 42: Lucas Boyé. 0-2, min.76: Pere Milla. 1-2, min.82: Luka Modric, de penalti. 2-2, min.93: Militao.

Árbitro: Ricardo de Burgos Bengoetxea (Comité Vasco). Amonestó a Militao (m.53) y a Vinicius (m.72) por parte del Real Madrid, y a Fidel (m.54), del Elche.

Incidencias: Partido de la vigésima segunda jornada de LaLiga Santander disputado en el estadio Santiago Bernabéu ante unos 40.000 espectadores. Antes del encuentro, el Real Madrid rindió homenaje a Paco Gento, leyenda del club que falleció el pasado martes a los 88 años. También ofreció a su afición, en las manos de Marcelo, la Supercopa de España que ganó hace una semana en Arabia Saudí.