El dominio total tras el descanso no fue suficiente para que el Real Madrid ganara en La Cerámica al Villarreal en un choque en el que los locales fueron mejores en la primera mitad y en el que un balón al larguero en el minuto 92 privó de la victoria al equipo visitante.

La primera parte estuvo marcada por el buen juego del equipo local, que superó a su oponente, y la segunda por una superioridad muy clara del conjunto madrileño, sobre todo en la primera media hora, que dio una imagen muy diferente con una buena actuación de Vinicius.

La noticia más llamativa en el inicio del encuentro fue la presencia de Bale en el Real Madrid para jugar como delantero centro en detrimento del centrocampista Luka Modric, aunque en el primer tiempo el jugador galés apenas participó en el juego de su equipo para mejorar en el segundo.

Aunque las fuerzas estuvieron bastante niveladas durante toda la primera parte, fue el equipo de Unai Emery el que ejerció un mayor dominio y dispuso de las ocasiones de gol más claras como consecuencia, sobre todo de sus penetraciones por ambas bandas, en especial por la derecha, donde Chukwueze siempre pudo con Marcelo.

Tras el descanso, el equipo de Ancelotti estaba obligado a dar un paso adelante para ser protagonista del encuentro y comenzó mejor que el equipo castellonense con un buen remate incluido de Asensio (m.49) que salió alto. Fue la antesala de una contra de Vinicius que culminó con un gran remate de Bale que desvió Rulli y acabó en córner tras rozar el larguero (m.56), además de ratificar que el equipo visitante había dado un paso adelante. Poco después Rulli deshizo una gran ocasión de Vinicius. El partido en nada tenía que ver al de la primera parte con un Madrid agrandado y un Villarreal empequeñecido y sin mostrar la sensación de peligro. Sin embargo, los blancos no fueron capaces de marcar y se dejaron dos puntos en La Cerámica.