Los Juegos Olímpicos de invierno de Pekín pasarán a la historia con una protagonista indiscutible. La patinadora prodigio Kamila Valieva, de 15 años, afrontaba la final de patinaje de ayer bajo la sombra del dopaje que la persigue desde que fue anunciado su positivo por trimetadizina detectado en un control de diciembre. Se anunció tras el oro en la competición por equipos y todo saltó por los aires. Valieva justificó el resultado al ingerir por error una medicación de su abuelo y el TAD la autorizó a competir en la prueba de ayer en un ambiente de tensión insoportable.

Sucumbió a la presión Valieva, que se quedó fuera del podio de patinaje artístico tras el programa libre en el que acabó cuarta. Su compatriota Anna Shcherbakova se hizo con el oro, seguida de la también rusa Alexandra Trusova y la japonesa Kaori Sakamoto.

La joven prodigio no pudo conservar la primera plaza del programa corto y finalizó el libre con una puntuación de 141,93 para un total de 224,09. La triunfadora fue Shcherbakova, que completó un magnífico ejercicio con el que sumó 175,75 puntos (100 en técnica y 75 en ejecución) para una suma final de 255,95. Dos días antes había sido segunda en el programa corto. Por detrás acabó Trusova, con 177,13 y una puntuación total de 251,73, mientras Sakamoto completó el podio con 153,29 y un total de 233,13.

El resultado final evitó una tremenda polémica, ya que el COI había anunciado que no habría ceremonia floral ni entrega de medallas si Valieva se ubicaba entre las tres mejores. El organismo temía que pudiese ser algún día despojada de su posible medalla debido a su caso de dopaje.

Hasta tres veces perdió el equilibro la adolescente en la final de ayer, que tuvo un desenlace dramático. Valieva rompió a llorar al concluir su ejercicio. La presión hizo estragos en la talentosa patinadora, que dio positivo por un medicamento prohibido para el corazón durante los campeonatos de su país del 25 de diciembre en San Petersburgo. El resultado no se reveló hasta el 8 de febrero, un día después de convertirse en la primera mujer en realizar una salto cuádruple en el hielo de unos JJOO. Esa maravilla de la patinadora de Kazan, que apenas llevaba cuatro meses compitiendo en categoría senior, aseguró el oro por equipos para Rusia. Valieva pasó en horas de estrella a sospechosa. El tribunal la autorizó a seguir compitiendo al ser menor de edad, ya que temía el “daño irreparable” que podría sufrir en caso contrario.