Paula Otero se ha pasado el último mes en una concentración en altura en Sierra Nevada. Así que al volver a su base habitual, en Pontevedra, se encontró con la sorpresa que ya había sacudido a la natación gallega en las últimas semanas, el cierre de la piscina de 50 metros del Complejo Rías do Sur en la que, un par de días a la semana, iba a realizar sus sesiones con el grupo del CGTD. Pese a este inconveniente en el tramo final de la preparación para el Open de Primavera, que será del 9 al 13 de abril, la coruñesa es optimista. “El trabajo ya está hecho”, dice. A Málaga va sin presión. Después de brillar como júnior, es su primer año como absoluta. “Intentaré igualar o bajar mis marcas, siendo consciente de que eso ya será difícil porque son my buenas”, explica, “y si puedo clasificarme para el Campeonato de Europa o para el Mundial, mejor”.
Y es que el Open de Primavera suele ejercer de trials de la natación española, con los mejores luchando por un puesto para las grandes citas internacionales de la temporada. Para el Campeonato de Europa, que será en agosto en Roma —donde el verano pasado se colgó su primera medalla internacional al ser bronce continental júnior—, se clasificarán automáticamente los campeones de las pruebas olímpicas individuales. Y a eso se aferra Paula Otero (CN Arteixo), que nadará 200, 400, 800 y 1.500 libres y 200 mariposa. Ya disputó en noviembre el Europeo en corta, pero a sus 18 años prefiere no marcarse objetivos y centrarse únicamente en su evolución.
En la concentración en Sierra Nevada dio un paso adelante. “Creo que me va muy bien la altura”, reconoce, “me encontré muy bien y los tiempos fueron rápidos, además me ayudó para corregir detalles técnicos”. Y ahora tiene que aprovechar esa trabajo, hecho en piscina de 50 metros, porque en Pontevedra ya no tendrá esa posibilidad. “Es un contratiempo a tan pocas semanas, pero aún podemos entrenar en la piscina del centro, de 25, así que peor sería si no tuviéramos nada. El trabajo ya está hecho”, insiste. Y en Málaga solo tiene que salir a relucir.
María de Valdés compite en los 10 kilómetros de la Copa de Europa de aguas abiertas en Israel
María de Valdés (Club Natación Liceo) compite hoy en la primera prueba de la Copa de Europa de aguas abiertas que se disputará en Eliat (Israel). La nadadora andaluza afincada desde hace varios años en A Coruña tomará parte, convocada por la selección española, en los 10 kilómetros junto a la joven Candela Sánchez. En categoría masculina solo fue seleccionado el olímpico Alberto Martínez. De Valdés, de 24 años, afrontará la competición después de haber pasado unos meses con problemas físicos ya que no pudo entrenar en las mejores condiciones durante varias semanas debido a una lesión en la mano. Después de un dura temporada en 2021, con todo el esfuerzo de luchar por la clasificación para Tokio en dos modalidades —piscina y aguas abiertas— y finalmente sin premio en ninguna, este año se lo toma de forma más relajada. Un paréntesis para coger fuerzas y el año que viene volver a estar preparada físicamente y mentalmente para retomar el objetivo olímpico y luchar para estar en los Juegos de París 2024.
