Partido a partido Carlos Alcaraz va refrendando su papel de favorito en el Masters 1000 de Miami. Tras un debut sólido ante Fucsovics, dejó también en la cuneta a todo un campeón de Grand Slam como Marin Cilic. Con un doble 6-4 en la pista GrandStand, el tenista de El Palmar firmó su billete a octavos.

Con madurez, gestionando el partido, Alcaraz consiguió pronto la rotura sobre el croata, todo un especialista al saque. En un madrugador tercer juego ya tenía el murciano la primera rotura, haciendo sufrir a Cilic. También tuvo que trabajar Carlos para el 3-5 con su servicio pero superó el trance y manteniendo también su siguiente saque se anotó el set. 

Más tensa se presentaba la segunda manga, con un Cilic que se la jugaba al todo o nada y no estaba dispuesto a darse aún por vencido. Crecía el porcentaje de ganadores en ambos bandos y la rotura se resistía a llegar. No se puso nervioso Carlos, que se defendía con todas sus armas para amarrar su saque.

Y entonces llegó el noveno juego, con el murciano al resto, sacando a relucir su revés para conseguir la rotura. Tenía en su raqueta cerrar con su servicio y no falló. Demoledor, no hizo prisioneros y cerró en blanco con un globo que devolvió lejos el croata.