El Real Madrid se impuso al Getafe (2-0) con solvencia, sin relajarse a pesar de la considerable distancia en el liderato de Primera y de estar en mitad de la eliminatoria de cuartos de final de Liga de Campeones frente al Chelsea (1-3 en la ida) y sin necesidad de subir el ritmo ante un conjunto azulón que se marchó del Santiago Bernabéu sin disparar entre los tres palos.

El partido previo a la vuelta de Champions contra el París Saint-Germain, frente a la Real Sociedad, sirvió para practicar la remontada (4-1), pero ayer fue muy diferente. Fue útil para rotar de cara al partido del Chelsea en el que el conjunto blanco tiene en su mano el pase a las semifinales, tras el 1-3 de la ida. Luka Modric, Toni Kroos y Dani Carvajal no disputaron ni un minuto. Y Casemiro, Benzema, Vinicius y Alaba fueron sustituidos. A pesar de esto, Carlo Ancelotti no quería un exceso de confianza y el equipo lo demostró desde los primeros instantes. Ya en el minuto 4 Karim Benzema superó a David Soria, pero el colegiado anuló el tanto por fuera de juego cuando en el Bernabéu ya se festejaba.

Sin ocasiones de gran calibre, Benzema y Vinicius, muy acertado en el regate dándole la noche a Djené, lideraron la ofensiva madridista ante un Getafe inoperante. Solo en un error de la defensa local al medir un saque de puerta en largo de David Soria permitió una internada en el área de Borja Mayoral que solventó David Alaba yendo al suelo; no tocó balón, pero estorbó lo suficiente para dejar en nada la acción.

Con el peligro de que se atascara el encuentro parecía llegar el descanso, hasta que el Real Madrid volvió a sacar a relucir su calidad individual en el m.38. Un centro de Vinicius con el exterior, recordando a un Modric que, seguro, sonrió en el banquillo propició el tanto de cabeza de un Casemiro que creyó más que la defensa azulona y superó a Soria.

Fue protagonista el brasileño, en lo negativo, seis minutos más tarde. El centrocampista firmó su segunda protesta con vehemencia y el colegiado riojano, César Soto Grado, le enseño la que es su décima amarilla del curso, perdiéndose el encuentro frente al Sevilla del domingo 17. Tras la reanudación, Lucas Vázquez sentenció para los blancos en el minuto 68 con el 2-0 definitivo.