La Audiencia Provincial de Almería ha condenado a Santi Mina, delantero del Celta, a cuatro años de prisión por el abuso sexual de una joven en Mojácar (Almería) en junio de 2017. Los magistrados también han impuesto al delantero una indemnización de 50.000 euros y la prohibición, durante 12 años, de acercarse a menos de 500 metros de la víctima así como a comunicarse con ella. Además, el Celta ya lo ha apartado del equipo y le ha abierto un expediente disciplinario.

¿Entrará en prisión el delantero celeste?

La legislación española establece el ingreso obligatorio en prisión a los condenados cuya pena sea superior a dos años. Para penas inferiores, la decisión depende de los jueces. Según el artículo 80 del Código Penal, "los jueces o tribunales podrán dejar en suspenso la ejecución de las penas privativas de libertad no superiores a dos años mediante resolución motivada".

La defensa del futbolista ha anunciado que recurrirá la sentencia al considerar que no se encuentra "ajustada a derecho". La abogada de Mina, Fátima Magdalena Rodríguez, argumentó que había quedado acreditado que la denunciante "prestó su consentimiento en todo momento" ya que cuando "le pidió que parase, él paró como ella misma confirmó" durante su declaración en sala y alegó que, todo caso, existía un error de tipo invencible porque, según dijo la abogada, "si no hubo consentimiento, desde luego no lo supo hasta que lo verbalizó".