El teléfono de Felipe Miñambres, durante las últimas semanas, está que echa humo y así será durante su planificación en el proyecto del ascenso. El director deportivo trabaja para vender jugadores y cuadrar cuentas mientras busca dar con la tecla en la elección del entrenador. El astorgano atendió a los medios de comunicación para hacer balance de la temporada, transmitir sus sensaciones y responder distintas preguntas, pero durante su comparecencia, recibió una curiosa llamada: la de Eduardo Coudet. 

Superados los veinte minutos de rueda de prensa, y mientras respondía a la cuestión de si contará con alguno de los futbolistas que acaban contrato de cara a la temporada que viene, SUPER cazó a Felipe Miñambres desatendiendo la llamada telefónica del actual entrenador del Celta al estar inmerso en la contestación de preguntas ante los periodistas presentes en la sala de prensa del Ciutat de València. El astorgano levantó el móvil de la mesa donde estuvo sentado, vio que ‘Chacho España’, tal y como tiene guardado en su agenda de contactos al argentino, estaba intentando contactar con él y decidió apartarlo de su vista dejándolo en la silla situada a su izquierda, para seguir con la comparecencia sin ningún tipo de distracción.

Sin embargo, entre Eduardo Coudet y Felipe Miñambres hay una relación de amistad muy buena y sincera. En noviembre de 2020, el entrenador fue el elegido para ocupar el banquillo de Balaídos ante la destitución de Óscar García con la finalidad de revertir la mala situación del Celta en ese momento, ya que estuvo con siete puntos y empatado con las posiciones de descenso. El actual director deportivo apostó por él pese a que solo tuvo experiencia como técnico en Latinoamérica y el nacido en Bueno Aires respondió. En la temporada 20-21 dejó al Celta octavo, a cinco puntos de Europa, y este año lo salvó de manera holgada, undécimo con 46 unidades en la tabla.