Los cuatro atletas españoles que participaban en la jornada del miércoles de los Mundiales de Atletismo al aire libre que se están disputando en Eugene tuvieron una notable actuación, aunque solo dos de ellos consiguieron pasar ronda. Lograron el billete para la penúltima ronda de 800 el campeón nacional Álvaro de Arriba y el campeón mundial en pista cubierta Mariano García mientras que no pasó por muy poco el finalista olímpico y mundial Adri Ben.

Por su parte, la catalana Sara Gallego buscaba una misión imposible en 400 vallas y estuvo a punto de batir otra vez su nuevo récord de España. ¡Enorme actuación a sus 21 años!

800 igualados

La primera de las tres rondas de los 800 metros masculinos se presentaba excitante, con una enorme igualdad en las seis series y los cuatro primeros defenestrados: el todavía campeón Donavan Brazier fue séptimo en la segunda serie muy lejos de su mejor forma con 1:46.72, el también estadounidense Bryce Hoppel (bronce en el Mundial bajo techo de Belgrado) fue cuarto con 1:46.98 y el británico Max Burgin ni siquiera hizo acto de presencia.

El campeón español Álvaro de Arriba corrió la serie más lenta (56.80 al paso por el 400) y ya tenía claro en la última curva que todo lo que no fuese estar entre los tres primeros supondría quedarse fuera de la final al no tener opciones de luchar por los seis tiempos repescados.

Y estuvo casi fuera cuando recibió un toque a la entrada de la recta y se vio obligado a abrirse, pero el salmantino reaccionó a lo grande y sacó toda su rabia para asegurarse la tercera posición con 1:49.30, superando por seis centésimas al campeón etíope Ermias Girma (17 años) que cayó eliminado.

Sin duda la mejor impresión de los tres españoles la ofreció Mariano García. El flamante campeón mundial bajo techo el pasado invierno en Belgrado ha ido lento este verano en su puesta a punta y realizó de largo su mejor carrera (y la más rápida) de este verano. De hecho, ya se le vio muy mejorado en los Campeonatos de España de Nerja. El genial atleta de Cuevas de Reyllo no tuvo problemas para marcar el ritmo en la primera vuelta (52.23) y en la recta final controló en todo momento mirando a ambos lados para ser tercero con 1:45.74 mientras Brazier era séptimo y se despedía del Mundial. ¡Cayeron los cuatro estadounidenses!

La mala noticia llegó en la cuarta serie con Adri Ben, quien no podrá emular su magistral sexta posición en los pasados Mundiales ni su sensacional quinto puesto en los Juegos de Tokio (segunda mejor posición española en prueba de pista por detrás de la cuarta de Eusebio Cáceres en longitud).

Aunque el gallego no está tan fino este verano por algún problema físico en momentos importantes de 2022, peleó con inteligencia, supo cerrarse en la última curva y esprintó con todo lo que tenía, pero no pudo evitar que lo adelantase el tunecino Ayouni. El exazulgrana fue cuarto con 1:46.71 y no pasó por tiempos.

Excelente Sara Gallego

Si en las series corrió ante la mejor vallista de la historia como Sydney McLaughlin, este miércoles a Sara Gallego le ha tocado compartir una durísima semifinal con Femke Bol, la europea más rápida de todos los tiempos. La catalana, de tan solo 21 años, afrontó con valentía la misión casi imposible de pelear por unas de las dos primeras plazas o por uno de los dos tiempos repescados de entre las tres series con una carrera de menos a más como es habitual en ella.

La atleta catalana Sara Gallego, en los Mundiales de Eugene 2022. Twitter

Gallego progresó en la recta, pero le faltó mantener ese cambio y terminó quinta con la segunda mejor marca española de siempre, 54.49. Sin duda, una gran actuación y más aún pensando en los Europeos de Múnich al ser la quinta europea a solo 25 centésimas de la tercera, la ucraniana Tkachuk (54.24).

En cuanto a la Santísima Trinidad de los 400 metros vallas, la suerte está echada. McLaughlin demostró que sigue siendo la mejor con 52.17 (ojo con su récord mundial de 51.41 en la final), Femke Bol también estuvo muy rápida con 52.84 y la exrecordwoman mundial Dalilah Muhammad evidenció que aún le falta punch en la recta final con 53.28.