El Espanyol, segundo equipo más valioso en descender a Segunda División

Pese a que la plantilla fue confeccionada para no pasar apuros, los periquitos han descendido y jugarán en la categoría de plata

R. A. C.

El Espanyol no pudo hacerlo. La llegada de una leyenda como Luis García a los banquillos trajo esperanza a la afición, pero la losa era demasiado grande. Tras su empate ante el Valencia, los catalanes son equipo de Segunda División. Y ojo, porque hay un dato que no deja muy bien ni a los jugadores ni a la dirección deportiva.

Los pericos son la plantilla más valorada en bajar a LaLiga SmartBank, solo por detrás del propio Espanyol en la temporada 2019-20, cuando contaron con la ayuda de jugadores como Raúl de Tomás. Ahora, con futbolistas como el exdeportivista Joselu en sus filas, no han logrado el objetivo.

El valor de la actual plantilla del Espanyol asciende a 113'7 millones de euros (por los 156'06 millones de euros de la ya mencionada 2019-20). Y es que los periquitos fueron los que más gastaron en el mercado invernal, además de firmar el traspaso más caro (César Montes, por 8 millones de euros).

Pudo ser superado por uno de los equipos que se salvó en la última jornada

Valencia CF - RCD Espanyol

Valencia CF - RCD Espanyol / Ivan Terron / Afp7 / Europa Press

Ahora bien, ojo porque este registro pudo ser superado por Valencia, Getafe o Celta de Vigo si hubiesen acabado cayendo al pozo de Segunda División en la última fecha. Aún así, Joselu es el máximo goleador español de LaLiga y el Espanyol cuenta con futbolistas como Sergi Darder, valorado en 16 'kilos', pero no han podido evitar el descenso.

La pregunta está clara: ¿podrá el Espanyol mantener el bloque en Segunda división o habrá desbandada? El propio Joselu es uno de los nombres que más fuerza están cogiendo para reforzar al Real Madrid, mientras que Darder también está en la lista de muchos clubes europeos.

La última vez que el Espanyol cayó a Segunda División (2019-20), los periquitos ascendieron a las primeras de cambio. El ascenso, junto con el del Mallorca, se consiguió de manera sencilla, dentro de lo que cabe, por lo que los catalanes saben en qué espejo mirarse.