La San Silvestre de A Coruña será este año “más solidaria” que en ediciones anteriores y se celebrará sobre diversos recorridos virtuales, debido a la pandemia provocada por el COVID-19. Esta nueva situación provocó una sorprendente respuesta por parte de numerosos atletas que anhelan participar desde sus lugares de residencia, lejos de la ciudad coruñesa. A día de ayer, la organización contaba con cerca de un millar de inscripciones, muchas de ellas de lugares tan sorprendentes como Estados Unidos y Francia. “Es curioso cómo numerosos coruñeses, o gente que conoce la ciudad, quiere aprovechar para recrear lo que conoce o recuerda a través de un recorrido virtual durante la prueba”, dice la organización, que un año más corre a cuenta del Club Rialto, y se mantiene el patrocinio de LA OPINIÓN A CORUÑA.

En la prueba, que cumple once años, se podrá participar a través de la aplicación oficial San Silvestre Coruña, que se puede descargar en la web www.sansilvestrecoruna.com. En esta edición, los corredores podrán participar en todos los recorridos programados que deseen o incluso en uno que libremente elegirá el propio participante. Además, la inscripción en esta oportunidad será gratuita, pero dado el carácter “más solidario” —será en beneficio de la Cocina Económica— está abierta la posibilidad de realizar “una donación mínima” de 5 euros, cantidad que dará derecho a los participantes a disponer de la tradicional camiseta conmemorativa y a todos los demás regalos que se suelen incluir en la bolsa del corredor. La participación en cuanto a donativos está siendo respaldada por la mayoría de los atletas que registraron su inscripción.

La prueba fue presentada ayer en el Palacio Municipal de María Pita, y contó con la presencia de Mónica Martínez, concejala de Deportes del Concello coruñés; José Manuel Vilariño, coordinador institucional de Abanca; Iria Rodríguez, responsable de Relaciones Públicas y RSC de Gadisa; María Silvia Rodríguez, gestora de Comunicación de Coca-Cola;David Rodríguez, jefe de Administración de LA OPINIÓN A CORUÑA, y David Iglesias, del Club Rialto.