En un mes, Golf Xaz abrirá sus puertas en Oleiros después de varios años de trabajo. Al frente del proyecto está Alfonso Castiñeira, director y gerente del que cree que se convertirá en el mejor club de Galicia.

En la cuenta atrás, ¿quedan muchos detalles por ultimar?

Ahora toca hacer los remates finales de obra y preparar el club para una apertura. La iniciaremos el 24 de mayo con la apertura de 9 hoyos, campo de prácticas, casa club e instalaciones deportivas. Y un par de semanas después los otros 9 hoyos. A partir del 1 de julio será el club social con las piscinas y la cafetería. Ahí ya estaríamos abiertos prácticamente al 100%.

Llegando ya al final... ¿cómo fue el principio, el germen de Golf Xaz?

Yo soy un recién llegado, que llevo un año y pico con un proyecto que viene de hace muchos años. El Concello de Oleiros siempre tuvo interés en que hubiese un campo de golf y las condiciones de la finca eran ideales para unas instalaciones de estas características, con el campo de golf, el pazo que es emblemático... Entendimos que había una demanda en A Coruña, Oleiros y alrededores que valoraba este tipo de clubes y que podía tener una buena acogida y así ha sido. No nos podemos quejar.

Es el primer campo que abre en Galicia desde 2007. En este tiempo... ¿han cambiado los retos, derivando más hacia la biosostenibilidad y respeto del medio ambiente?

Los retos siempre van cambiando. Cuando se abrían campos de golf antes las motivaciones eran diferentes a las que son ahora. También depende de la zona de España que estés. En Marbella es diferente que en Galicia. Ahora se valora más respetar el medio ambiente y ayuda a desmitificar el golf como deporte que va a en contra del medio ambiente. Nosotros aquí vamos a utilizar aguas reciclada de la EDAR de Lorbé para regar el campo, es decir, aguas residuales. Y la finca ya contaba con una arboleda magnífica que enriquece mucho. Además, con la coyuntura que tenemos con el COVID, supone un reto adicional, pero también el golf ha sido declarado como uno de los deportes más seguros porque se practica al aire libre, se mantiene la distancia de seguridad y no hay grandes aglomeraciones.

¿Otro mito, que el golf es exclusivo, también está desterrado?

Absolutamente. El golf como cualquier otro negocio tiene para todo tipo de jugadores. Hay campos que son absolutamente prohibitivos y otros municipales y públicos y que no son caros. El equipamiento cada día las marcas sacan líneas más básicas. Hoy en día cualquiera que quiera hacer golf, puede hacerlo a un precio más o menos económico.

¿Cómo es el recorrido?

Son 18 hoyos. La finca es muy suave y por lo tanto es muy agradable de caminar. De distancia tiene por encima de los 6.100 metros con greens generosos y amplios. El diseño no está concebido solo para profesionales, está pensando para disfrutar y divertirse.

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Golf Xaz, primer campo de golf de Galicia que recicla aguas residuales Carlos Pardellas

¿Ya hay alguna competición programada?

Al ser un campo nuevo, tenemos la suerte de que muchísimos circuitos quieren organizar aquí competiciones. Ya estamos moviéndonos y de aquí a final de año tendremos más de un torneo.

¿Se aprovecha bien en Galicia el turismo deportivo?

En turismo de golf la complicación que tenemos es el tema del clima, siempre hay esa incertidumbre porque a nadie le gusta jugar cuando llueve. Galicia tiene mucho potencial con los paquetes juntándolo con la gastronomía y el aspecto cultural. Los ingleses son los que más viajan en Europa para jugar al golf, pero nosotros siempre nos hemos centrado más en el turismo nacional de la mano de otras actividades.

¿Con cuántos socios nacen?

El primer año tenemos un límite de 500 acciones. Aún no tenemos el número exacto. Pero estamos en buena línea para concluir el año con esos 500.

¿Hay mucha demanda?

Sí, porque no nos encasillamos en un club de golf. Hay también instalaciones de pádel, tenis, gimnasio y para conciliar ocio, familia y negocios. Todo en un espacio cerrado, seguro y al aire libre.

¿Cuánto trabajo hay detrás?

La consolidación de un club es mucho más que una construcción, hay por detrás unos estatutos, concebir actividades, supervisiones... son muchas horas y mucho esfuerzo de mucha gente. Tenemos ganas de abrir para que la gente vea lo que hemos estado haciendo en los últimos años. Es nuestra ilusión. Abrir, que todo funcione, despegar y poquito a poco ir mejorando el club.

Cuando el bebé nazca, ¿dará todavía más trabajo?

Un club es un elemento vivo y las necesidades van cambiando. Habrá que estar atento porque habrá cosas que haya que corregir, otras que funcionen bien... será una fase de aprendizaje y sarna con gusto no pica. Ahora tenemos que abrir y estaremos encantados de hacer el trabajo que haga falta para que esto sea un éxito.

¿Cómo se ven en cinco años?

Creemos que tenemos un producto único en Galicia. No me gusta compararme, pero nosotros intentamos diferenciarnos en el estilo de vida. Creemos que el atractivo es ese. Nuestro tipo de cliente varía mucho, desde jóvenes profesionales que ven en el club un lugar establecer y fortalecer relaciones laborales, otros que ven el sitio donde ir con sus hijos y estar en familia y otros que solo quieren venir a jugar. Dentro de unos años nuestro idea es estar entre los mejores, sino el mejor, club de Galicia.