Hace un año que Sergio Olmos anunció que dejaba el baloncesto y aunque no se arrepiente de su decisión —“estoy muy contento con mi nuevo proyecto”—, a estas alturas de la temporada, en pleno play off de ascenso a la ACB, le empieza a entrar el gusanillo. “Sí que me están dando un poco de envidia, esta parte del año es en la que más me gustaba estar en la cancha. Me entran ganas de quitarme el chandal y saltar a la pista”, reconoce el expívot. Y más cuando en una de las semifinales se cruzarán los que fueron sus dos últimos equipos. El Leyma, con el que jugó tres temporadas y vivió las semifinales de la 2015-16, y el Granada.”Que gane el mejor”, dice, sin mojarse, pero sí reconoce que en A Coruña se están haciendo tan bien las cosas que el club parece “destinado”, antes o después, “a llegar a la ACB”.

Olmos sitúa el inicio de esa trayectoria ascendente en aquella temporada 2015-16. El equipo, bajo la batuta de Tito Díaz, ilusionó y enganchó a la afición. Acabó quinto la temporada regular, lo que ya era la mejor clasificación de la historia en la LEB Oro. En cuartos de final los naranjas se cruzaron con el Breogán y aquella serie fue histórica, con triunfo por 3-2 para los coruñeses, que después en las semifinales también forzarían el quinto contra Melilla y rozaron la proeza de meterse en la final, aunque finalmente se quedaron sin gasolina y a las puertas de la ACB. “Tengo muy buen recuerdo de ese año”, reconoce, “y fue una pena porque nos quedamos a nada de la final”. Pero sí fue el primer paso hacia algo más grande. “Creo que aquel año empezó a forjarse algo, a hacerse las cosas muy bien. En A Coruña se está haciendo un gran trabajo y antes o después el equipo va a estar en ACB”, reflexiona.

Y eso que cuando él estuvo en el club, esa posibilidad parecía más una quimera que una realidad. “Aún existía el canon y eso hacía que todos viésemos el ascenso como algo imposible”, recuerda el valenciano. “Ahora, sin canon, se hace más factible, se abren las posibilidades”, añade. De ahí que la mayoría de los equipos hayan decidido poner toda la carne en el asador, lo que se nota en la igualdad de la competición: “Es lo que tiene esta liga, cualquiera puede ganar. Se ha demostrado en estas series de cuartos de final. El Leyma ganó en dos partidos, pero ninguno de los dos fue fácil —el último con tiro ganador de Monaghan casi sobre la bocina—. Los demás en tres y de manera ajustada”.

También prevé igualdad para las semifinales entre el Leyma y el Granada que empiezan el miércoles, con el primer partido en la ciudad andaluza y el segundo el sábado en A Coruña. “Yo creo que está claro que el Leyma tiene el mejor físico de la liga. Sin embargo, me parece que Granada tiene más experiencia”, analiza sobre las dos plantillas. “Apostaría a que el Leyma va a querer correr e intentar desgastar mucho físicamente al Granada mientras que este tratará de tirar de la experiencia, pero lo que es seguro es que serán dos partidos muy apretados”, vaticina.