El nadador coruñés Jacobo Garrido regresó ayer a la ciudad tras su estreno en los Juegos Paralímpicos, en los que logró tres diplomas, con un recibimiento por todo lo alto. Sus familiares y amigos lo esperaban después de aterrizar en el aeropuerto de Alvedro para felicitarlo por su participación en Tokio 2020.

Jacobo Garrido finalizó los que han sido sus primeros juegos “satisfecho” con los tres diplomas logrados, tal y como manifestó a través de las redes sociales. El nadador también aseguró haber cumplido “un sueño” tras cerrar su participación y emprender el viaje de regreso tras la clausura de la competición el pasado fin de semana.

Ayer lo esperaban en Alvedro sus familiares y amigos, que celebraron con él su papel en los recientes Juegos de Tokio con 19 años recién cumplidos. Jacobo Garrido abrió la competición con un quinto puesto en los 400 libres, la prueba en la que se proclamó campeón del mundo y subcampeón europeo.

A pesar de que hizo su mejor marca de la temporada (4.17.41), el coruñés no pudo alcanzar el podio, que era uno de sus objetivos en los Juegos, y se tuvo que conformar con la quinta posición en una prueba en la que dominaron con claridad los nadadores australianos.

Jacobo Garrido también tuvo una participación destacada en el relevo 4x100, en el que logró un cuarto puesto junto al equipo español presente en Tokio. El coruñés fue decisivo nadando la última ronda y consiguiendo que España pasara de la quinta posición a la cuarta, lo que le proporcionó un nuevo diploma.