Después de un año y medio de organización y de siete intensos días de competición, Pablo López, director de carrera del Raid Gallaecia-AR World Championship, descansaba ayer entre la sensación de manos vacías, la satisfacción del trabajo bien hecho y las ganas de desconectar. Nunca es fácil sacar adelante una prueba de este estilo, con una participación de 90 equipos y 358 deportistas, un escenario de 630 kilómetros, 20 toneladas de material para transportar, la mezcla de modalidades deportivas y horarios de sol a sol. Y encima la pandemia irrumpió para complicarlo más, con la incertidumbre siempre a cuestas. El resultado final, a todos los niveles, fue la recompensa. El sábado, en la clausura celebrada en el Parrote, el coruñés escuchó sobre todo dos palabras: felicidades y gracias. Eso ya será un recuerdo imborrable.

“Todo han sido ‘felicidades’ y ‘gracias”

“Empezamos con el proyecto hace un año y medio”, recuerda López Franco. “La adjudicación fue en 2019 y a principios de 2020 nos pusimos ya a mirar recorridos, patrocinios, voluntarios... pero claro, cuando empezamos no había pandemia. Y lo condicionó todo. Primero porque no te deja avanzar al ritmo que te gustaría. Y después porque no sabes qué va a pasar y si todo lo que haces va adelante o no. Hubo mucha incertidumbre y fue muy estresante”, reconoce. Pero la respuesta decidida de los deportistas paliaba en cierta medida los miedos: “Alucinamos. Abrimos inscripciones en medio de una pandemia y se llenó. Había muchísimas ganas de correr, de compartir días y aventura”. Aunque hubo equipos, de países con más restricciones, que finalmente no pudieron viajar, como el Seagate de Nueva Zelanda, campeón en seis ocasiones. “Es la espina que nos quedó”.

“Todo han sido ‘felicidades’ y ‘gracias”

Después de siete días de competición, que arrancó en Monforte de Lemos, pasó por enclaves tan espectaculares como los Cañones del Sil, O Courel, Manzaneda, las Fragas do Eume y el entorno del Mandeo, y terminó en el paseo del Parrote —que encumbro a los suecos del Armed Forces Adventure Team—, todo salió a pedir de boca. “El sábado en la ceremonia, al ver a todos los equipos satisfechos, recibir las felicitaciones... fue increíble. Pero sobre todo nos dieron las gracias. No creían que nadie se fuera a atrever a hacer esto en la situación en la que estamos. Pero nosotros queríamos ser positivos, con la mentalidad de un corredor de aventura: llegar a la meta”, señala. El Raid Gallaecia ya tenía experiencia, con una carrera desde 2005. “Lo más desafiante era sobredimensionar lo que sabíamos hacer. Suponía una competición más larga y con el triple de equipos. Durante una semana había que mover gente por toda Galicia tanto de día como de noche. Como un circo ambulante”, indica. ¿Repetirá? “En seis meses lo diré mejor. En 2022 descartado. Después...”, concluye sin cerrar la puerta al regreso del Mundial a Galicia.

“Todo han sido ‘felicidades’ y ‘gracias”

“Todo han sido ‘felicidades’ y ‘gracias”

“Todo han sido ‘felicidades’ y ‘gracias”