Al Deportivo Liceo le faltó efectividad para hacer frente al potencial del Palau i Plegamans, el vigente campeón de Europa y de liga, que dominó en el Palacio de los Deportes de Riazor pero terminó pidiendo la hora ante el empuje de las verdiblancas, que buscaron el cuarto gol y con él, el empate incluso sin portera en los últimos treinta segundos. El resultado hubiese cambiado con un poco más de acierto a bola parada. Las coruñesas se estrellaron contra un muro llamado Laura Vicente, que detuvo tres penaltis y tres faltas directas. Las catalanas, que se marcharon de la pista sin esperar al saludo de las locales a su afición, no perdonaron una y castigaron cada error con un gol. Estreno con derrota de Stanis, el nuevo técnico, pero mimbres para seguir trabajando una vez pasada una fase del calendario muy complicada ya que les tocó medirse, de forma consecutiva, a los cuatro favoritos: Manlleu, Telecable, Cerdanyola y Palau.

En el minuto cinco el partido ya arrancó con uno de esos fallos a bola parada. Alba Garrote no pudo hacer su magia habitual desde la directa porque Vicente acertó muy bien su intención de levantar la bola. El Liceo tenía buenas oportunidades pero le fallaba la definición. Como tras una jugada desde la izquierda de Lucía Yáñez, que centró a una Lucía Paz que había ganado la posición dentro del área. Mucho menos necesitó el Palau. Aina Florenza encuentra el hueco aunque no exista y por uno de esos se coló la bola para el 0-1. Se había descontrolado un poco defensivamente el Liceo y lo pagó. Se pudo resarcir antes del descanso. Una contra de tiralíneas entre María Sanjurjo, Adriana Soto y Garrote, con tiro fuera de la asturiana. La coruñesa generó las dos últimas. Una con un amago de pase a la izquierda para darlo finalmente a la derecha, donde Bea Gaete no conectó bien. Y otra con un derribo que fue penalizado con una directa en la que Vicente paró hasta en dos ocasiones.

Perdonó y el Palau golpeó en el inicio de la segunda parte con el segundo, de Laura Puigdueta. Pero por fin el Liceo consiguió marcar, la bola empujada por Adriana Soto. Se acumularon más ocasiones. Hasta tres seguidas en el área. Un penalti de Garrote y una contra. Nada. Y las catalanas en cambio se aprovecharon de dos bolas que se le colaron a Vicky Caretta por debajo de la axila para tomar una ventaja que parecía definitiva (1-4). Los goles finales de Sanjurjo y Gaete hicieron creer en la remontada. Hasta el final.