“Ayer —por el martes— estaba muy enfadado pero desde hoy —por ayer— ya estoy pensando en soluciones. Y la única que veo es trabajar más. Íbamos a tener unos días de descanso que ya no vamos a tener”. La derrota del Leyma contra el Juaristi tiene sus primeras consecuencias. Lo desveló ayer Sergio García, entrenador de los naranjas, en declaraciones a Radio Coruña Cadena SER. “Estamos en diciembre, queda muchísimo y no se ha ganado ni se ha perdido nada. Pero es evidente que tanto el club como sus aficionados, incluso la prensa, quiere un equipo que demuestre otras cosas”, añadió y desveló que ni en la derrota por 40 puntos contra el Breogán en la temporada 2019-20 (97-55) tuvo “tan malas sensaciones” como le dejaron los suyos en el partido en Azpeitia con el que cerraron 2021.

Para el entrenador vasco hay que hacer una distinción entre resultados —con un balance de siete victorias y seis derrotas en trece partidos— y rendimiento. “Y el rendimiento fue malo”, sentenció. Habló de la primera parte del encuentro, hasta el descanso, con un comienzo dubitativo y 17 minutos posteriores que “fueron impropios de la filosofía de equipo que queremos ser”. “Eso es lo que no nos gusta. El tercer cuarto viene a reforzar la idea de que en la primera parte nos faltó mucha actitud. Tenemos que recapacitar y ser autocríticos porque no basta con ser un equipo anotador. Cuando nos ha ido bien, incluso muy bien, ha sido la mentalidad de crecer desde la defensa”, recalcó.

El Leyma, cuyo objetivo principal es clasificarse para el play off de ascenso a la ACB, inició la temporada con problemas y dos derrotas, pero se recuperó con seis victorias seguidas que le dejaron incluso a las puertas del liderato. Oviedo se volvió a cruzar en su camino para hacer de bestia negra, con un balance en las últimas cinco jornadas de un triunfo y cuatro derrotas. El próximo partido será el domingo 9 de enero en casa contra el Prat.