Acaba de cumplir 90 años, pero Pepe Guillín tiene la cabeza mejor
Acaba de cumplir 90 años, pero tiene la cabeza mejor amueblada que la mayoría de a los que les doble la edad. En ella están guardados parte de los recuerdos del último siglo del deporte coruñés, del que es testigo y protagonista. Pasó por el Ural y el Español en el fútbol modesto, fue delegado del Fabril y directivo del Deportivo durante 13 años. Formó parte del Liceo durante sus años dorados, como delegado del equipo, convirtiéndose en un segundo padre para muchos de los jugadores argentinos que, años después, siguen eternamente agradecidos. Una trayectoria de mención especial.
Otra de las menciones especiales es para AMI, la Agrupación de Montañeros Independientes, que también tendrá que subir al escenario entre los finalistas a mejor club. El jurado valoró sus continuos proyectos de inclusión para menores con problemas de inserción social y para menores con discapacidad. El caso de Guille, un niño con ceguera que ya participa en pruebas de exhibición, es el mejor ejemplo de que no existen barreras.
