Enmanuel Reyes tuvo que conformarse ayer con la medalla de plata de la categoría de 92 kilos en el Campeonato de Europa de boxeo disputado durante la última semana en Ereván (Armenia), El coruñés no pudo superar en la final al italiano Aziz Abbes Mouhiidine, que ya había sido su verdugo en las semifinales del Campeonato del Mundo de hace tan solo unos meses. Los jueces lo tuvieron claro y el pupilo del PlanasBox recibió un 5-0 en contra. De hecho, de todas las puntuaciones de los tres asaltos, solo un juez durante el segundo asalto se decantó por el cubano nacionalizado en detrimento de su rival. Subcampeón de Europa. Bronce mundial. Y diploma olímpico.

El italiano demostró ser uno de los grandes valores del boxeo mundial. Ya había deslumbrado en el Mundial, donde solo cedió en la final frente a la leyenda de Julio la Cruz —con el que Reyes perdió con polémica en los cuartos de final de los Juegos Olímpicos de Tokio—. Y aunque después de aquella cita el coruñés se tomó la revancha y pudo con Mouhiidine en uno de sus torneos de preparación, esta vez se topó con un púgil muy rápido de pies y que tanto en defensa como con unos ataques muy eléctricos, se lo puso muy complicado.

Fue un combate muy bonito entre dos grandes adversarios. Los que habían sido los mejores durante toda la semana previa. Un combate también diferente al protagonizado por ambos en el Mundial. Enmanuel Reyes fue mucho más agresivo en este. Desde el primer asalto. Empezó con un puño de Mouhiidine que impactó en su rostro. Lo que le obligó a remontar. Conectó un par de golpes, también el italiano, que incluso provocó un resbalón que casi lo lleva a la lona. Se lucieron ambos, pero los jueces se decantaron por el transalpino. Y eso ya marcó los siguiente. Porque era Reyes el que tenía que arriesgar y atacar. Y el italiano se sintió muy cómodo en la defensa, esquivando con poses espectaculares los intentos de derechazos de conocido como El Profeta de Monte Alto. El segundo asalto cayó para el rival y el tercero, ya con Reyes a la desesperada, también. Decisión unánime. La vendetta tendrá que esperar.

Un oro y tres platas para el equipo español

Era una jornada histórica para el equipo español, que se había clasificado para cuatro finales del Campeonato de Europa de boxeo. Pero solo Martín Molina, en la categoría de peso mosca (48-51 kilos) consiguió la medalla de oro al imponerse al inglés Kiaran MacDonald por decisión unánime de los jueces. Su entrega de medallas estuvo marcada por la polémica porque la organización, a la hora de que sonara el himno español, puso el que contiene la letra de José María Pemán. De todas formas, ya no tuvo que sonar más el himno en la tarde porque el resto de finalistas españoles fueron plata: Enmanuel Reyes en los pesos pesados; José Quiles en los pesos ligeros (57-60 kilos) y Ayoub Ghadfa en el súper pesado.