El 2 y 3 de septiembre, con Olot como escenario, el Liceo defenderá el título de la Supercopa de España conquistado el año pasado. El día 26 se sortearán las semifinales —también el calendario de las competiciones nacionales—, aunque el campeón de la OK Liga será junto al Barça, campeón de la Copa del Rey, cabeza de serie, por lo que solo podrían verse las caras en la final. Los posibles rivales de ambos son el Reus, subcampeón de liga al perder la final del play off frente al Liceo (3-0), y el Noia, que llegó hasta las semifinales y también fue eliminado por los verdes en el quinto partido (3-2).
El conjunto dirigido por Juan Copa volverá al trabajo el 1 de agosto y dispondrá de un mes para prepararse para luchar por la primera competición oficial del año. Teniendo en cuenta que el técnico coruñés debe acoplar al menos a seis piezas nuevas —por tres el Noia (Martí Gabarró, Kyllian Gil y Jan Marimón), dos el Barça (Carles y Marc Grau) y ninguna el Reus—, lo lógico es que el Liceo vaya de menos a más a lo largo del curso, pero igualmente no renunciará a nada porque su objetivo siempre es ganar todos los títulos.
Los verdiblancos lograron en 2016 el único que faltaba en sus vitrinas. Es curioso que se resistiera tanto la Supercopa de España dado el palmarés del que es el club más laureado de Galicia. Sin embargo ni en los gloriosos 80 ni en las épocas sucesivas pudo levantar este trofeo. Lo hizo por primera vez en la temporada 2016-17 después de eliminar al Vic en semifinales (4-2) y después vencer al Reus en la final por 1-2, goles de David Torres y Marc Coy.
A partir de ese momento, parece que el Liceo se convirtió en un especialista de la competición con la que todos los años se inicia la temporada —menos la siguiente a la pandemia, que la Supercopa se disputó el 2 y 3 de enero— al sumar dos más, es decir, tres en seis años —por dos del Barça y una del Reus—. La volvió a ganar en la temporada 2018-19, cuando eliminó el Reus en semifinales por 3-2 y después se impuso al Barça en la final con idéntico resultado y un gol de Carlo di Benedetto a falta de 12 segundos para el final que empezó a cambiar el signo de los partidos entre verdiblancos y azulgranas. Porque después le vencieron en la final de la Copa del Rey 2020-2021 y solo unos meses más tarde, en la final de la Supercopa 2021-22, por 3-2 y una exhibición de faltas directas de Jordi Adroher.
