Hockey sobre patines

Doce días ‘locos’ del Liceo: seis vuelos, cuatro partidos y tres competiciones

Reus, Calafell, Barcelona y de nuevo Calafell, próximos destinos de los verdiblancos

Bruno di Benedetto y Aleix Esteller,frente a frente en el partido del Liceo del pasado sábado. |  // VÍCTOR ECHAVE

Bruno di Benedetto y Aleix Esteller,frente a frente en el partido del Liceo del pasado sábado. | // VÍCTOR ECHAVE / María Varela

A Coruña

El Liceo ya sabía que le esperaba un mes con un calendario infernal. Acaba de dejar atrás, de hecho, una semana de exigencia máxima con partidos, con menos de 48 horas de separación entre uno y otro, frente al Benfica en la Liga Europea y contra el Noia en la competición doméstica en el Palacio de los Deportes de Riazor —con empate en ambos—. Pero lo que le queda en las próximas tres semanas no bajará de intensidad, porque además incluirán viajes. Un ir y venir constante que hará que en doce días los verdiblancos solo estén cinco en su casa y tenga que coger seis aviones para jugar cuatro partidos de tres competiciones. Una aventura que empezará este sábado con destino a Reus; que continuará la semana siguiente con mini gira de cuatro jornadas por Cataluña para medirse en Champions al Calafell y al Barça en liga y que terminará —por así decirlo, porque en el caso del Liceo los viajes siempre siguen— con otro desplazamiento a Calafell para la Copa del Rey.

Esta semana es, dentro de lo que cabe, una de las más tranquilas hasta dentro de un mes. Porque Juan Copa dispondrá de todos los días para preparar el partido del sábado 19 en Reus en el que defenderá la segunda plaza del ataque del Calafell y del propio Reus, que le pisan los talones en la clasificación, a cuatro puntos los dos. El equipo verdiblanco madrugará ese mismo día para coger un avión destino a Barcelona (1.088 kilómetros) y desde allí desplazarse en bus hasta la localidad tarraconense (108 kilómetros, una hora y cuarto de viaje). El encuentro está fijado para las 21.00 horas y al terminar el Liceo regresará a su hotel habitual para al día siguiente volver a levantarse muy temprano, ir a Barcelona y coger el vuelo de vuelta a casa.

Los verdiblancos no estarán para celebraciones de Carnaval porque esa semana afrontan otros dos encuentros. Por eso, sin tiempo para reponerse del viaje a Reus, el lunes 20 toca entrenamiento. Solo tres sesiones en A Coruña (lunes, martes y miércoles) porque el jueves 23 es día de partido de Champions en Calafell. Otra vez visita a Alvedro para el vuelo a Barcelona y desde allí, desplazamiento a la localidad de la Costa Dorada (65 kilómetros, otra hora en autobús) para un duelo vital en las aspiraciones liceístas de alcanzar la final a ocho continental. Los coruñeses ya no regresarán y se quedarán allí tres días hasta el domingo 26, cuando les toca medirse al Barcelona. El club verdiblanco le pidió al culé jugar el viernes o el sábado por la mañana, para abaratar costes y reducir los días fuera de casa. Pero finalmente el partido será el domingo.

Ese mismo día el Liceo regresará a A Coruña y esta vez solo tendrá dos días de estancia en la ciudad antes de tener que coger el miércoles 1 de marzo otro avión, de nuevo hacia Barcelona y después a Calafell, para disputar la Copa del Rey, en la que debuta el jueves 2 contra el Caldes en cuartos de final. Dependiendo de hasta dónde llegue en el torneo del KO su estancia se prolongará más o menos, pero si alcanza la final, no regresaría hasta el domingo 5 para poner fin así a tres semanas de peregrinaje. Que no a la locura de partidos porque la siguiente, la del 5 de marzo, volverá a tener dos, aunque en casa (Calafell en Champions y Alcoi en liga) —y la posterior, como si fuera el día de la marmota, otro viaje a Calafell—.

El conjunto coruñés ya está acostumbrado a viajar. Al final de cada temporada acumula unos 40.000 kilómetros a sus espaldas, con los desplazamientos al aeropuerto, las esperas, los vuelos, el autobús hasta las distintas pistas... un factor extra que Juan Copa no se cansa de reclamar porque, dice, las condiciones nunca podrán ser las mismas mientras el resto de equipos de la competición, incluido sus principales rivales, solo tienen que pasar por esto una vez al año —más los desplazamientos en Europa y competiciones como la Supercopa y la Copa del Rey—.

Suscríbete para seguir leyendo

Tracking Pixel Contents