Baloncesto - LEB Oro

87-62 | Una victoria que vale por dos para el Leyma ante el Oviedo

Los naranjas suman su noveno triunfo seguido y se quitan el gafe del Oviedo

Esto se pone serio. Novena victoria seguida del Leyma, que ayer no solo ganó al Oviedo sino que espantó a su bestia negra para demostrar que esta temporada se escribe la historia con otra tinta. El conjunto que dirige Diego Epifanio tiene recursos para cada exigencia. Y una fortaleza mental de hierro en un momento de confianza absoluto que provoca que si viene uno de los mejores pívots de la liga, sea el cinco local el que haga su mejor partido de la temporada. Lotanna Nwogbo peleó, marcó triples, reboteó, defendió: 27 de valoración con 20 puntos, 8 rebotes y 7 faltas recibidas. Pero el esfuerzo es coral. Es la fuerza del equipo, que tendrá otra semana plácida para preparar el duelo en Alicante.

El arranque en la dirección de Goran Filipovic fue casi perfecto. Encontraba a sus compañeros y encima anotaba, de dos y de tres. También Nwogbo empezaba su recital más que le tocara bailar con el mejor jugador del rival, un Oliver Arteaga que venía de ser el MVP de la pasada jornada y que, en su anterior enfrentamiento, en la primera vuelta, acabó por KO con los dos cincos naranjas, eliminados por faltas personales. El americano estaba muy centrado, como demostró con rebotes casi imposibles y una jugada de 2+1 que apoyada en un triple de Galán dio a los locales su primera distancia seria (14-9). El problema estaba en las faltas. Cinco para el Leyma. Solo una del Oviedo. El base croata tuvo que sentarse y entró Ingus Jakovics, protagonista del final del primer cuarto con tiros libres y una jugada de 3+1 para el 23-16.

Oviedo seguía resistiendo. Un triple aquí, una acción de Arteaga allá y aguantaba el chaparrón (30-25) de un Leyma que se notaba que empezaba a meter la directa. Sin ninguna floritura, aún con errores como los que Epi había señalado en la previa como las pérdidas y el rebote, pero un ritmo e intensidad constantes muy difíciles de igualar. En cuanto encadenó un par de buenas acciones defensivas, la distancia en el marcador se fue fácil por encima de los diez puntos (38-27 tras un 2+1 de Lundqvist) y se consolidó con el trabajo bajo tableros de Nwogbo. Al descanso, ya iba por los quince (45-30).

El Leyma salió mejor de vestuarios, algo que ya es una especialidad y que demuestra su capacidad de concentración. Con un 9-2 de parcial en el arranque se abrió una brecha de más de veinte puntos (54-32), cimentada en una intensidad defensiva que obligaba a que el Oviedo tuviera que rozar la perfección para anotar cada canasta, desesperándolo. Dos triples de Yunio Barrueta eran casi la sentencia (60-38), pero entonces el Leyma tuvo un pequeño bloqueo. El partido se trabó. A Filipovic se le escapaba el balón de las manos. Diagne fallaba debajo de canasta. Se salía un triple de Vega. El número de faltas de los naranjas aumentaba mientras el público gritaba “¡Que pite Arteaga!”. Los asturianos se fueron acercando (63-49) pero Nwogbo marcó un triple decisivo sobre la bocina (66-49).

Porque acabó con los fantasmas. Que ni ganando de 14 está uno tranquilo contra el Oviedo. Cambió la dinámica y el Leyma retomó su plan y se puso en su modo rodillo. Daba igual que, por cuarto cuarto consecutivo su casillero de faltas creciera de forma desproporcional a la del rival. Volvió a aparecer Filipovic con sus triples y su seguimiento de las jugadas. Lotanna completó un trabajo descomunal. Y volvieron los veinte de ventaja con unos minutos finales ya incluso de relajación.

LEYMA 87 - OVIEDO 62

Leyma Coruña (23+22+21+21): Goran Filipovic (12), Yunio Barrueta (11), Olle Lundqvist (7), Alejandro Galán (6) y Lotanna Nwogbo (10) —cinco inicial—. Ingus Jakovics (10), Javi Vega (1), Atoumane Diagne (4), Aleix Font (5), Djordje Simeunovic (8), Álex Hernández (3) y Pau Isern.

Alimerka Oviedo (16+13+19+13): Clevon Brown (4), Romeo Crouch (13), Fabio Santana (2), Thorir Thorbjarnarson (5) y Oliver Arteaga (13) —cinco inicial—. Adriá Domenech (2), Marc Martí (12), Marc Peñarroya (6) y Chuso González (5).

Árbitros: Morales, Zamora y Pellitero. Eliminaron por cinco faltas personales a Atoumane Diagne y Romeo Crouch.

Cancha: Palacio de los Deportes de Riazor.

Asistencia: 2.000 espectdores.

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