Iván Merichal: «El Dakar es un sueño, correr en arena será muy exigente»

Tras varios años a las puertas, Iván Merichal (Sabadell, 1983), afincado en A Coruña, vivirá su primer Dakar en enero sobre su KTM. La punta del iceberg de un anhelo en el que su objetivo es disfrutar y llegar «de una pieza».

¿El Dakar es un sueño o una oportunidad para usted?

Un gran sueño más que nada. Oportunidad sería si buscase dar el salto a algún equipo oficial y para nada es mi caso. Planteo el Dakar como una gran aventura, el objetivo es terminarlo de una pieza. Hacer todos los kilómetros y volver con la medalla de haberlo completado. Siempre le digo a mis amigos que no esperen verme delante. No es mi objetivo ni tengo el nivel para hacerlo.

¿Cómo se ha preparado?

Llevo tres años preparándolo. Ha habido muchísimo trabajo con la moto buscando velocidad, técnica y resistencia. Y complementando todo eso con un trabajo más físico de gimnasio e indoor. También he intentado hacer otras disciplinas. He corrido dos maratones, dos medias… Deportes que me ayuden a enfrentarme a ese sufrimiento que me voy a encontrar y a incrementar la resistencia física.

¿Le ha obligado a llevar la preparación a otro nivel?

Sí, sí. Sin duda. Un amateur como yo no tiene hábitos de deportista de élite muy marcados, pero te los tienes que plantear en cuanto planteas el reto del Dakar. Sacar el alcohol de tu vida, por ejemplo. Ahora llevo varias semanas sin tomar nada de cafeína, orientado a que, aunque soy muy cafetero y me está costando, una vez que esté ahí en el Dakar, que sabemos que se duerme poco, la cafeína tenga el efecto máximo posible. En cuanto a la moto, lo que nos vamos a encontrar más extraño es la arena, que aquí no la tenemos. Hay pistas rápidas, piedra… Encuentras de todo, excepto arena. Desde que empecé a plantearme el Dakar te obligas a hacer intensivos en dunas. Para nosotros lo más fácil es bajar a Marruecos. Además, este año tuve que hacer Abu Dhabi, que para mí al principio fue un palo, porque ya esperaba tener plaza. Al final, con distancia, creo que correr este rally, que fue 100% de arena, sirve para hacer un máster en el terreno.

"Correr el Rally de Abu Dhabi, que fue 100% de arena, me sirvió para hacer un máster en el terreno"

En su camino le ha dado importancia a la sostenibilidad y colaborará con ENKI.

El Dakar es un privilegio y yo quería dar un retorno. Se me ocurrieron estas dos vías de acción. Una muy local, a través de ENKI, que nos une la pasión por la vida y por las ruedas. El tema medioambiental es importante por la sostenibilidad. Calculamos la huella de carbono de mi proyecto, no solo contando la carrera, sino las competiciones previas, los entrenamientos, los vuelos… y más o menos el impacto es de algo menos de 8 toneladas. Compensamos esas emisiones plantando árboles. Tenemos ya un bosque que va por las 7 toneladas.

La segunda etapa, nada más arrancar, es de 48 horas seguidas y casi 1.000 kilómetros.

Tenemos que estar más concentrados en no romper nada, no hacernos daño… A nivel logístico y descanso es más complicado. Hay que planteárselo como dos días. Donde te toque parar a dormir, lo haces y descansas lo mejor que puedas. No hay ayuda entre días y es importante ser conservador. Avanzar lo máximo posible y completar esas dos jornadas.

¿Cuál es la mayor dureza a la que se enfrenta en el desierto?

La navegación en el desierto es complicada. Es un entorno falto de referencias. Es un punto de dureza mental adicional al que puedes encontrar en Europa que sigues pistas. El desierto es un terreno exigente y duro, son espacios enormes, vas muy rápido, cualquier imprevisto que no veas venir a esa velocidad puede suponer un problema. Ese estrés mental hay que gestionarlo y desgasta. Y luego es un terreno muy duro. Cuando hay piedras son una tras otra durante 200 kilómetros, que es algo que te deja machado. La arena es exigente y pide un juego mental diferente y físicamente es agotadora. Estas pruebas además tienen muchísimo kilometraje. Todo unido es una bomba. A nivel de líquidos estamos obligados a salir con tres litros. Mínimo gastamos unos cinco, pero a parte de aguas llevas sales, carbohidratos…

"A nivel de líquidos estamos obligados a salir con tres litros. Mínimo gastamos unos cinco, pero a parte de aguas llevas sales, carbohidratos…"

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¿Cómo gestiona la financiación al no ser profesional?

En mi caso yo lo he trabajado muchísimo buscando dar retorno. Es una locura de dinero que sin ayuda de la gente que apoya el proyecto no sería posible. También es importante el papel de la organización, que nos facilita la vida y también de los equipos, que en caso de los que vamos con asistencia nos hace sencilla la existencia. No tenemos que preocuparnos de llevar algo o de qué elegir en la caja. De todos modos, el Dakar no es el Dakar por casualidad. Todos los pequeños detalles están cuidados. Es una prueba desmesuradamente cara, pero tratan de ayudar al máximo a todos los equipos

Además de dura, es una prueba peligrosa. ¿Cómo lo gestiona a nivel familiar y mental?

Yo soy un piloto muy conservador. El riesgo siempre está ahí y todos tendemos a pensar que cualquier cosa le pasará a otro. Somos todos conscientes de que hay un riesgo. Lo que yo trato de explicarle a mi hija con todo esto es que el temor o el miedo no puede paralizarte y evitar que hagas lo que te guste. Y por otro lado que hay que trabajar muy duro para cumplir tus sueños, pero si lo haces, todo es posible.