Martí Serra se agiganta en el adiós al Liceo

Si había alguna duda con la implicación o con las prestaciones de Martí Serra hasta final de temporada tras anunciar su adiós al Liceo, él mismo se ha encargado de despejarlas. Todo a base de ponerle titanio a su portería, todo a base de convertirse de nuevo en ese portero que acabó haciéndose un hueco en la selección española vestido de verde.

Los goles en el Palau Blaugrana se hicieron de rogar, pero acabaron llegando y fueron tres para los culés. Sirvieron para echar abajo esa pretensión que empezó en quimera y que acabó tocando con la punta de los dedos de superar el récord de imbatibilidad de Aitor Egurrola con el propio Barcelona. Se quedó a unos pocos minutos. Fueron 222 para Serra y el vasco se había ido hasta los 230 en la temporada 16-17. Casi. En contra del portero del Liceo jugó que algunas de sus metas a cero fueron en Europa en duelos ante el Valongo y el Dinan Quevert. Más allá de en qué competición se ponga bajo palos, Martí es un seguro y el Liceo, una roca.

En el Palau Blaugrana acabó encajando tres goles, pero paró más que nunca. Sus detenciones a tiros decisivos se fueron hasta los doble dígitos. Es uno de los mejores momentos de Serra como verdiblanco, sino el mejor. Y eso que su principio de temporada fue titubeante hasta el punto de que Juan Copa le dio la alternativa en varios partidos al canterano Martín Rodríguez, retornado este verano del Saint Omer francés.

El Liceo decidió buscarle hace meses un sustituto bajo palos y cerrar la etapa en A Coruña de Serra, quien ahora se está revelando como un caramelo en el mercado. El equipo coruñés tiene atado a Blai Roca, guardameta del Noia, una garantía, un portero afianzado en uno de los mejores equipos de la OK Liga en los últimos años.

No será el único movimiento que tiene planeado el Liceo quien tiene cercado a Toni Pérez, ahora en el Sporting de Portugal. Puede haber más movimientos en un plantilla perfilada en gran medida. Queda por saber cuál será el futuro de Fran Torres Tombita, Pablo Cancela, Tato Ferruccio y Fabri Ciocale.