Nada más bajarse del avión procedente de Sevilla, Fernando Vázquez se dirigió ayer por la tarde a Riazor con sus futbolistas para empezar a preparar el encuentro del sábado frente al Atlético de Madrid (22.00 horas), para el que pierde a tres de sus pilares, uno por línea: Sílvio en defensa, Abel Aguilar en el centro del campo y Pizzi en ataque. Tres bajas sensibles cuyos efectos intentará minimizar.

El lateral portugués no puede enfrentarse al equipo rojiblanco tal y como está pactado en su contrato de cesión. Por el mismo motivo tampoco podrá jugar su compatriota Pizzi, que frente al Betis forzó su quinta tarjeta amarilla para cumplir sanción este sábado y así quedar limpio de cartulinas. Igualmente castigado por acumulación de amonestaciones está Abel Aguilar.

Tanto el colombiano como Pizzi acabaron tocados el partido de Sevilla, el pivote con una sobrecarga en el sóleo de su pierna derecha y el extremo con un esguince en el ligamento lateral interno de su tobillo derecho. Ayer no salieron al campo, aunque estarán listos para reaparecer en Zorrilla, el sábado día 11 (18.00 horas). En Riazor solo trabajaron los convocados ante el Betis. Los que no viajaron se ejercitaron por la mañana en Abegondo.

Álex se presenta como el recambio del colombiano y a priori cuenta con más papeletas que Assunção. Juan Domínguez está convencido de que "el nivel se va a mantener". "Cualquier ausencia siempre se nota, porque cada jugador aporta cosas distintas a otro. Siempre que hay una baja se nota y se echa de menos, pero estoy convencido y seguro de que los que sustituyan a esas bajas lo van a hacer igual de bien".

En el lateral izquierdo el técnico echará mano de Ayoze. Más dudas tiene para cubrir el hueco que deja Pizzi en el extremo zurdo. Su sustituto natural, Diogo Salomão, sufre una lesión muscular de grado I y prácticamente está descartado. Los médicos desaconsejan su concurso, así que todo apunta a que Javier Camuñas tendrá una nueva oportunidad. La plantilla vuelve a Abegondo hoy a las 17.30 horas.