El Deportivo, líder de Segunda, reanuda esta tarde los entrenamientos (18.00 horas, Abegondo) para empezar a preparar el primer encuentro del año, la visita del próximo domingo al Nuevo Estadio de La Victoria de Jaén (18.15 horas). Será el primer ensayo tras los ocho días libres que Fernando Vázquez concedió a sus jugadores tras el último encuentro de 2013, el 3-3 ante el Numancia en Riazor. El técnico reúne hoy a su plantilla pendiente todavía de conocer cuál será el grupo definitivo de futbolistas que tendrá a sus órdenes hasta el 30 de junio. Todo dependerá de las posibles entradas y salidas que se produzcan en el mercado invernal. Es uno de los múltiples interrogantes que se desvelarán en enero. Los principales son los siguientes:

Pendientes de Culio. El argentino cuenta con una oferta importante del Al Wasl de Dubái, cuyo entrenador es su compatriota Héctor Cúper. El Deportivo se embolsaría una cantidad próxima a los 700.000 euros por la operación, según fuentes próximas al club, mientras que el jugador se aseguraría un contrato mucho más suculento económicamente que el que actualmente le liga al equipo coruñés. Su marcha debilitaría mucho el potencial ofensivo del Dépor, que se quedaría sin su jugador franquicia. Por eso el todavía presidente, Augusto César Lendoiro, prometió públicamente hacer todo lo posible para que no salga. "No posibilitaremos la salida de Culio", afirmó el día de Nochebuena tras anunciar la retirada de su candidatura a la reelección.

Renovación de Núñez. El madrileño regresa hoy al trabajo con la esperanza de seguir en el Deportivo hasta junio, si bien su contrato finaliza mañana. Desde el club le han transmitido que cuentan con él hasta final de temporada y también Vázquez lo tranquilizó en ese sentido. Falta que los administradores concursales den el visto bueno a su continuidad. Si esa autorización no llega antes del domingo, Antonio Núñez se perdería el encuentro frente al Jaén. Ha participado poco por culpa de su mala suerte con las lesiones, pero en los pocos minutos que disfrutó siempre dejó buenas sensaciones. En la pasada jornada, ante el Numancia, se estrenó como titular. Cumplió con creces, firmando incluso una asistencia de gol a Borja Bastón.

E28 nombres en la agenda. La lista de futbolistas interesantes que manejaba el actual consejo de administración de cara al mercado invernal, publicada ayer por este diario, incluye nombres ilustres como el de El Caño Ibagaza (Olympiakos), algunos pretendidos en el pasado reciente como el uruguayo Rodrigo Mora (River Plate), viejos conocidos como Diogo Salomão (Sporting de Portugal) y nuevos talentos del perfil de Ricardo Esgaio, también del Sporting lisboeta. La mayoría son representados por Jorge Mendes o están en la órbita de clubes y agentes bajo la influencia del intermediario portugués. Tras las elecciones, el nuevo presidente -Tino Fernández Pico, Manuel López Cascallar o Germán Rodríguez Conchado- tendrá apenas diez días para realizar contrataciones. Estas serán posibles siempre y cuando la Liga de Fútbol Profesional acceda a elevar el tope salarial que impidió cerrar más refuerzos el pasado verano.

Arizmendi, entre algodones. El canterano del Atlético siguió un plan especial en Madrid durante las vacaciones en busca de una mejoría notable de sus molestias en el ciático. Vázquez estará atento a cómo vuelve para calibrar sus opciones de entrar en la convocatoria para el encuentro del domingo.

Wilk y Lemos, en camino. El polaco está en la recta final de su recuperación, aunque todavía no se ejercita con el grupo. Más tardará en volver el santiagués. Su evolución es muy positiva, pero en el mejor de los casos no estaría listo para la competición hasta marzo.

Un once todavía por definir. Pese al reducido número de futbolistas que tiene a sus órdenes, Vázquez apenas ha podido repetir alineación debido a los numerosos contratiempos en forma de lesiones y sanciones. Todavía no hay un once de gala claro. Ni siquiera un dibujo táctico que se imponga sobre todos los demás, ya que los retoques en el sistema han sido constantes.

Aislados del vaivén institucional. Como han hecho hasta ahora, futbolistas y técnicos blanquiazules intentarán seguir aislados de la trascendental junta de acreedores y del proceso electoral para que toda esa incertidumbre institucional no influya en su rendimiento.